Introducción
Un pastor famoso, escribió un libro titulado, 2008 Testigo final de Dios. En este libro, él afirma saber cuándo comenzarán los juicios de las copas de la ira de Dios sobre el planeta. Él cree que ya estamos en el periodo de la tribulación.
Este autor mezcla partes de Apocalipsis con sus propias ideas extrañas y arrogantes. Él combina también algunos eventos catastróficos – incluyendo problemas en el campo magnético de la tierra, erupciones volcánicas, radiaciones solares, tsunamis y aun colapso económicos – con los juicios divinos sobre el planeta. Él escribió,
En Apocalipsis se hablan de los dos testigos – dos profetas de Dios, establecidos para testificar a todo el mundo de su plan y propósito para la humanidad. Es ahora con confianza, valentía y gran claridad que anuncio a través de la revelación directa de Dios, que yo soy uno de los dos testigos… me han sido revelados los tiempos de los juicios. Sé qué sellos del apocalipsis se están abriendo. Sé que el sexto sello ya se ha abierto. Sé exactamente el día en que el primer sello fue abierto…
El nombre de este pastor es Ronald Weinland. El afirma que Dios no le permitió al apóstol Juan que revelara algunas cosas iban a pasar, ya que esa tarea le corresponde a él como el ultimo testigo de Dios. De hecho, el libro afirma que, mientras que el apóstol Juan recibió la tarea de registrar eventos proféticos, Weinland recibió la tarea de revelar los tiempos.
¿Qué hay del hecho que Apocalipsis no es “la revelación de Juan” sino “la revelación de Jesucristo.”?
¿Qué hay del hecho que el apóstol Juan dijo que si alguno agregaba una sola palabra a su profecía seria maldito, anatema?
Me pareció interesante que este autor declaró en su libro, que fue publicado a mediados de 2006, que para el 2008, Estados unidos ya no existiría como nación. Bueno… no creo que sea necesario comentar acerca de eso.
Muchos de los seguidores de Weinland vendieron todas sus pertenencias y se fueron a vivir en cuevas y refugios temporales para esperar el juicio de Dios sobre la tierra, esperando sobrevivir.
Esto me hace acordar al libro titulado 88 Razones que afirmaba que el rapto ocurriría en 1988. Los creyentes en Corea, especialmente, le encontraron razón a los cálculos del autor, vendieron sus hogares y renunciaron a sus trabajos para esperar que el rapto ocurriera en 1988.
Una cosa es hacer cálculos, aunque no es recomendable; es otra cosa decir que uno es el profeta final de Dios.
El 2008 llegó y se fue, y nada pasó. Bueno, la verdad es que algo pasó. Weinland se fue de vacaciones a distintas partes del mundo, y luego fue acusado de fraude fiscal.
Él siempre ha negado ser un falso profeta, y simplemente dice recibir mayor revelación de Dios, que según él sigue posponiendo su juicio por algún motivo. A todo esto, él ahora tiene una nueva fecha para el juicio. Aparentemente tiene que ocurrir en algún momento desde noviembre de 2015 a mayo de 2019. Y de la misma forma que Dios ha pospuesto su juicio en el pasado él puede posponerlo en el futuro. Hasta el día de hoy sigue viviendo a costa de sus seguidores.
Él no es el primero ni el último en predecir el futuro, decir tener revelaciones de Dios y ganar dinero a costa de sus seguidores. Miles de personas siguen ciegamente a estas personas, porque quieren saber mas del futuro de lo que Dios ha revelado.
¿Recuerda el año 2000? ¿Todo el pánico? Aun las librerías cristianas se llenaron de libros anunciando que el regreso de Cristo.
Se de iglesias que se pusieron a juntar trigo y grano en los sótanos. Se de cristianos que estaban considerando mudarse. Conocí a una pareja que estaba promoviendo la compra de molinos de aire para poder generar energía en la ciudad
Sé que a todos nos gustaría saber si Jesús va a regresar durante nuestra vida. Todos los que amamos a Señor aman queremos verlo pronto; anhelamos su venida, su reino, el nuevo cielo y la nueva tierra.
Y eso es bueno. Espero que nuestro estudio de Apocalipsis le ayude a anhelar más y más la venida del Señor, pero evitemos los extremos. No cerremos los ojos a lo que está pasando en el mundo – eventos que nos muestran como todo se está preparando para la venida de Cristo: los esfuerzos para lograr una comunidad global y una economía mundial y un líder mundial. Hay cristianos que dicen a cualquier mención de cómo se desarrolla nuestro mundo dicen, “ah, patrañas.” Evitemos eso, y sin embargo, también evitemos el otro extremo de fijar fechas y nombres.
Es correcto decir “su venida esta más cerca que nunca,” sin embargo, no manipulemos el texto para decir que va a pasar tal año o tal día.
Querido oyente, evite a aquellos que afirman tener otra palabra de parte de Dios, cuando Dios ya dijo a través del apóstol Juan que esta es su última palabra profética (Apocalipsis 22:19).
A la verdad, que el corazón humano quiere más conocimiento del futuro. Esa es la razón por la que hay millones de personas que consultan su horóscopo en todas las formas que existen.
Leí una vez que una adivina estaba presionando a un creyente para que le dejara ver su futuro. El creyente le preguntó, “¿usted me está diciendo que sabe que es lo que voy a estar haciendo mañana a esta misma hora? Absolutamente respondió la adivina. ¿Sabes que? Dijo el creyente, te pago el doble de lo que pides, si me puedes decir que estaba haciendo a esta misma hora el día de ayer. La adivina sonrió y se fue.[i]
Tengo buenas noticias para usted. No tenemos que depender en falsos profetas con nueva revelación, no necesitamos vender todas nuestras cosas e irnos a vivir a las montañas – podemos vivir con más que una corazonada de algún adivino o algún autodenominado profeta.
Tenemos la palabra de Dios. Y aunque no se nos dicen todos los “cuándos y cómos” se nos dice mucho acerca de los que, y los donde, y los quienes, y aun bastantes de los porqués.
Estamos descubriendo, juntos, cosas que son mucho más que corazonadas.
¿Como es que sabemos estas cosas? ¿Como es que podemos confiar en el apóstol Juan?
Es interesante notar que antes de que Juan presentara su visión, él se aseguró de que entendiéramos quien es el verdadero autor de esta revelación. Los primeros 8 versículos de Apocalipsis 1 son simplemente una frase tras otra, que atestigua que esta revelación ha venido de parte del trino Dios. Apocalipsis 1:1 comienza con estas palabras.
La revelación de Jesucristo…
A veces, después de predicar, una o dos personas se me acercan, con uno de mis libros y me piden que se lo firme. A veces me gusta hacer una broma y pregunto, “quiere que lo firme a nombre de Chuck Swindoll, o John MacArthur, o algún pastor famoso? No, me dicen, fírmelo usted. Y abro el libro en la primera página y lo firmo.
Lo que tenemos aquí en los primeros 8 versículos – en la primera página del libro de apocalipsis – es la firma, el autógrafo de Dios.[ii]
El Libro del Trino Dios
Este libro de Apocalipsis es el libro del trino Dios. Note Apocalipsis 1:4
Juan, a las siete iglesias que están en Asia: Gracia y paz a vosotros, del que es y que era y que ha de venir.
La Firma de Dios el Padre
Esta es la firma de Dios
En el idioma hebreo, su nombre, “Yahweh,” era simplemente el verbo ser. Puede ser traducido, “YO SOY.” YO SOY suena como una afirmación en tiempo presente, pero en realidad, este verbo hace referencia a la eternidad de Dios.
Este es el libro de revelaciones del Yo Soy. Yo Soy quien era, Yo Soy quien es, y Yo Soy quien ha de venir.
Dios el Padre está presente en todo momento, pasado, presente y futuro.
El ser humano, aunque tiene un alma inmortal – nunca cesará de ser, si tiene un principio.
Dios no tuvo principio y no tendrá fin. Para Él, todas las cosas están en un eterno presente. Él está fuera del tiempo.
Esta es una declaración de su eternidad. Este es un anuncio de su deidad.
A todo esto, la firma de Dios el Padre es intercambiable con la de Dios el Hijo, porque ambos son igualmente Dios.
Esta es la razón por la que Jesús creo tanto alboroto usó este mismo verbo para hablar de sí mismo. Jesús dijo,
Antes que Abraham fuese, yo soy (Juan 8:58)
Jesús no estaba anunciando que era un profeta como afirma la religión del Islam, o el producto de una relación entre Dios el Padre y María, como afirman los Mormones. Él estaba diciendo, “YO SOY Dios. yo no tuve principio.”
Esto explica porque en el siguiente versículo, dice la Biblia que,
Tomaron entonces piedras para arrojárselas (Juan 8:59).
La gente estaba pensando, “tenemos que deshacernos de este blasfemo.”
Ellos claramente entendieron que Jesús estaba declarando su igualdad con Dios el Padre. Él afirmaba ser igualmente divino.
Cuando miramos Apocalipsis 1:8, leemos la firma
Yo soy el alfa y la omega, dice el Señor Dios…
La mayoría cree que este es Cristo hablando en este versículo. En mi Biblia esta en letras rojas, así que debe ser Jesús, ¿cierto? Bueno, Juan no tenía un lápiz negro y otro rojo – el color de la tinta no es inspirado. Aquí, esto se refiere a Dios el Padre.
En el último capítulo de apocalipsis – el capítulo 22 – el Señor Jesús claramente es el que está hablando en el versículo 13, y Él se refiere a sí mismo como
…el Alfa y la Omega…
“yo soy A a la Z”
Es realmente impresionante reconocer que Cristo está hablando en Apocalipsis 1:8 y le ofrece el mismo título al Padre que luego usa para sí mismo. Esto revela una vez más la igualdad de atributos y esencia en la trinidad.
De hecho, note en el principio de Apocalipsis 1:8 que el que es “el Alfa y la Omega” es llamado “el Señor Dios.”
y más adelante, este versículo termina con el Alfa y la Omega refiriéndose a Sí mismo como.
… el Todopoderoso.
Esta es la palabra griega que se usa en lugar del nombre hebreo “Shaddai.”
Shaddai es el título de divino poder y fortaleza.
A todo esto, a través del Antiguo Testamento, “Shaddai” era el nombre de Dios que se usaba frecuentemente en contexto con las promesas de Dios. Habla de la habilidad de Dios de cumplir cada promesa que ha hecho. Apareció por primera vez cuando Dios reafirmó su pacto con Abraham en Génesis 17:1.[iii]
Es interesante que al principio de esta profecía, Jesucristo le recuerda a Juan que todas estas promesas proféticas, aunque parezcan imposibles de realizarse, se van a cumplir porque el “Shaddai” ha hablado.
La Firma del Espíritu de Dios
La siguiente persona de la Trinidad que firma este libro de profecía es el Espíritu Santo. Note en Apocalipsis 1:4 que esta esta profecía no solo viene de Dios el Padre, sino de los siete espíritus que están delante de su trono.
Por primera vez leemos un número significativo en el libro de Apocalipsis – el número 7. Cuando encontramos el número 7, tenga en mente que este es un símbolo de perfección y totalidad.
De hecho, este número 7 en referencia al Espíritu Santo, viene de Isaías 11:2. En este versículo, el profeta habla de la perfección y plenitud del Espíritu de Dios que iba a venir sobre el Mesías.
Isaías describe al Espíritu de una manera séptuple, en el capítulo 11:2. Él es
- El Espíritu del Señor
- El Espíritu de sabiduría
- El Espíritu de entendimiento
- El Espíritu de consejo
- El Espíritu de poder
- El Espíritu de conocimiento
- El Espíritu del temor del Señor
Los siete espíritus es un símbolo del Espíritu Santo en su totalidad y perfección.[iv]
La Firma de Dios el Hijo.
La tercera persona de la trinidad que oficialmente firma su nombre en la primera página de este libro es Jesucristo. El libro de Apocalipsis no es solo un libro de parte de Dios el Padre, y Dios el Espíritu Santo, sino también de Dios el Hijo.
Dios el Hijo es descrito en tres formas en Apocalipsis 1:5,
- Primero, él es el testigo fiel
- Segundo, él es el primogénito de los muertos
- Tercero, él es el soberano de los reyes de la tierra.
- Primero, Dios el Hijo es el testigo fiel.
Esta descripción tiene que ver con su responsabilidad. Al apóstol Juan le apasiona hablar de Cristo, como aquel que entrega el testimonio auténtico y veraz.
En su evangelio, él describe a Cristo como aquel que vino al mundo para dar a conocer la persona y el plan del Padre (Juan 1:18).
El escribió que Cristo dijo cuando estuvo de pie delante de Pilato,
He venido al mundo para dar testimonio de la verdad… (Juan 18:37).
Cuando Jesucristo habla, el habla la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad. Como un testigo sobre el estrado, Cristo está de pie y declara fielmente
…el camino, la verdad y la vida… (Juan 14:6).
- Segundo, Cristo también es llamado el primogénito de los muertos.
Esta no quiere decir que Cristo fue el primero entre muchos nacidos y luego resucitó de los muertos.
La palabra griega se refiere a Su supremacía en conquistar la muerte y levantarse de la tumba. Primogénito no se refiere a una secuencia de tiempo, sino a la preeminencia de Aquel que conquistó la muerte para siempre.[v]
Cristo es el testigo fiel, lo que se refiere a su responsabilidad.
Cristo es el primogénito de los muertos, que se refiere a su resurrección.,
Miremos la tercera descripción de Dios el Hijo.
- Tercero, Cristo es llamado el soberano de los reyes de la tierra.
Cristo es el soberano de los reyes de la tierra, lo que se refiere a su dominio supremo.
Cristo va a reinar sobre todos los reyes de la tierra. Él es
- Salmo 24:7 – el rey de gloria
- Daniel 4:37 – el rey del cielo
- Mateo 2:2 – el rey de los judíos
- Juan 1:49 – el rey de Israel
- 1 Timoteo 1:17 – el rey de los siglos
- Apocalipsis 15:3 – el rey de los santos
- Apocalipsis 19:16 – el rey de reyes.
Esta no es solo una corazonada de Juan, esta es la revelación del trino Dios – y todos los tres han firmado su nombre en la primera página.
Luego, Juan irrumpe en un Aleluya – una doxología de adoración.
La Adoración de los Santos
Que hacemos después de leer la revelación de la gloria de Dios el Padre, la supremacía de Dios el Hijo, y la perfección del Espíritu Santo – que podemos hacer sino adorarle? ¿Amen?
Esto es lo que hace Juan. El está exiliado en la pequeña Isla de Patmos por el emperador Domiciano quien odiaba a Cristo y a los Cristianos. Juan dice, “Domiciano, acabo de recibir una revelación de parte del emperador celestial, y en ella vi que tú no eres el soberano, tu solo eres un gobernador temporal. El reino de Cristo va a ser eterno. Hagas lo que hagas, Él va a reinar sobre todos, como el Rey de Reyes.
Veamos ahora las tres partes de la doxología de Juan. Primero, Juan exalta a Jesús por su amor.
- Jesús nos ama.
En Apocalipsis 1:5, Juan escribe
…al que nos amó…
En el original, esto está en tiempo presente. Mejor traducido seria, “al que nos ama.” Tendemos a pensar que Dios nos amó – en algún tiempo distante. No querido oyente, él nos ama ahora.
Ray Stedman, en su comentario de esta doxología, contó de una vez que D.L. Moody fue invitado a darle una charla a los estudiantes de la prestigiosa universidad de Cambridge. La mayoría de los universitarios estaban furiosos que permitieran que Moody, un hombre sin ninguna educación, fuera a darles una charla. Sentían que era un insulto.
Aquella noche, un grupo de jóvenes se sentaron en la fila del frente, esperando el momento indicado para burlarse, abuchear y humillar a Moody; pero, justo antes de que Moody se parara a predicar, Ira Sankey, cantó un himno. Y mientras él cantaba, la audiencia se quedó en silencio. Inmediatamente después del himno, Moody subió al podio apunto con su dedo a los jóvenes en la primera fila y les dijo, “jóvenes, que nunca se les pase por la mente que Dios no los ama; porque él sí que lo hace.”
Estos jóvenes, impactados con la pasión de Moody, y el poder del mensaje, que escucharon en silencio mientras Moody predicaba acerca del amor de Cristo.[vi]
Gran teología.
El amor de Cristo esta en tiempo presente. No es, “Él amó,” no “Él podría amarme si yo…,” no, “él nos amará,” sino “Él nos ama.”
No solo Jesús nos ama, sino que. Segundo,
- Jesús nos libertó.
Juan continua en Apocalipsis 1:5 diciendo,
Él nos lavó (mejor traducido, libertó) de nuestros pecados por su sangre.
Aquellos que han creído en el evangelio de Cristo y su obra expiatoria en la cruz han sido libertados.
Feliz yo me siento al saber que Jesús,
Libróme de yugo opresor,
Quitó mi pecado, clavólo en la cruz,
Gloria demos al buen Salvador.[vii]
Rompe cadenas del pecar;
Al preso librará;
Su sangre limpia al ser más vil,
¡Gloria a Dios, soy limpio ya! [viii]
Ese himno compusieron Horatio Spafford y Charles Wesley, ese himno podemos cantar hoy todos los santos.
Jesús nos ama. Jesús nos libertó.
- Tercero, Jesús nos hizo reyes y sacerdotes.
Mire Apocalipsis 1:6
Y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre – a él sea gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén.
Ahora somos sacerdocio santo (1 Pedro 2:9).
Que hacían los sacerdotes en el Antiguo Testamento? Ellos buscaban acercar a las personas a Dios. Nosotros también, como creyentes, llevamos el evangelio para que, por el poder del Espíritu Santo, se acerquen a Dios.
Los sacerdotes hacían sacrificios. ¿Que es lo que debemos sacrificar nosotros?
Romanos 12:1 dice que debemos presentar nuestros cuerpos como sacrificio vivo, santo, agradable al Señor.
La tarea en el Antiguo Testamento era más compleja, pero a la vez más fácil. El sacerdote debía animales muertos, y ofrecer a un sacrificio muerto es más fácil que ofrecer un sacrificio vivo. Los sacrificios muertos no pueden salirse del altar.
Nosotros debemos ofrecer nuestras vidas diariamente a nuestro Dios.
Hebreos 13:15 nos informa que nosotros también debemos ofrecer continuamente un sacrificio de alabanza a Dios…
Nosotros, querido oyente, somos sacerdotes, por medio de la fe en Cristo, y estamos ejerciendo nuestra ocupación mientras ofrecemos nuestras vidas, nuestro tiempo, nuestras posesiones, y nuestra adoración a Dios.
La Predicción del Salvador
Ahora veamos que continúa después de esta breve doxología. Note apocalipsis 1:7.
He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra harán lamentación por él. Sí, amén.
El resto del libro de Apocalipsis revela los detalles de este versículo. Esta es la revelación de la venida de Cristo.
Juan dice, “esta no es solo una corazonada, esta es la promesa revelación, y firmada por Dios el Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo.”
Un Rabino le dijo a un pastor, “la diferencia entre nosotros es que cuando venga el mesías, nosotros vamos a decir “bienvenido,” mientras que ustedes van a decir “Bienvenido otra vez.”
Según este texto, eso no es verdad. Todas las personas que sobrevivan la tribulación, especialmente el gran número de Judíos que llegarán a poner su fe en Cristo, el Mesías, lo verán viniendo en su gloria y victoria, y junto con toda la tierra lo verán y sabrán que no esto no es “bienvenido,” sino “bienvenido otra vez.”
John Phillips, escribió lo siguiente en su comentario llamado, Explorando Apocalipsis: Mientras que Ricardo, corazón de león, estaba en batalla, su reino calló en malas manos. Su astuto pero desagradable hermano, usurpó los derechos del rey y lideró el reino de mala forma. Las personas en Inglaterra sufrían y anhelaban el regreso del rey.
Un día, el rey Ricardo volvió. Cuando llegó a Inglaterra, marchó directo hacia su trono. Se dice que Ricardo fue derribando uno a uno los obstáculos que su hermano le puso en su camino hasta que llegó a su trono. La gente se alegró e hicieron sonar las campanas de toda la ciudad. El rey estaba de vuelta. “Larga vida al rey.”
John Phillips continuó escribiendo, “un día, un rey más grande que el rey Ricardo va a venir a reclamar un reino más grande que el de Inglaterra. Y todos los que han abusado su poder en su ausencia, y han mal administrado su mundo, serán quitados. Que maravilloso que va a ser aquel día.[ix]
Esta no es una corazonada. Esta es la verdad y Dios la ha firmado – el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo – Aprobándola.
Así que, ¿que vamos a hacer? Ofrecerle nuestros cuerpos, nuestras vidas, nuestra lealtad, nuestra devoción, nuestro continuo sacrificio de alabanza.
A Dios el Padre celestial
Al Hijo nuestro Redentor
Al eternal ConsoladorUnidos todos alabad. Amen.
[i] John Phillips, Exploring Revelation (Loizeaux Brothers, 1991), p. 18.
[ii] Ray Stedman, God’s Final Word (Discovery House, 1991), p. 11.
[iii] Larry Richards, Every Name of God in the Bible (Nelson, 2001), p. 33.
[iv] Stedman, p. 6.
[v] MacArthur, p. 25.
[vi] Stedman, p. 8.
[vii] Horatio G. Spafford, “It is Well With My Soul”.
[viii] Charles Wesley, “O For a Thousand Tongues to Sing”.
[ix] Phillips, p. 22.