En este episodio, exploramos cinco formas de arruinar un país, una vida y todo lo demás, a través de las advertencias de Salomón en Eclesiastés 10. Primero, ser consentido y permisivo, ejemplificado por líderes que priorizan el placer sobre el deber. Segundo, ser indecente e indisciplinado, mostrando la necesidad de líderes con integridad y disciplina. Tercero, ser desatento e indiferente, ignorando problemas críticos. Cuarto, ser egoísta y superficial, centrado en el dinero y el placer. Y quinto, ser obstinado y crítico, descuidando las palabras y acciones. Reflexionamos sobre la importancia de la madurez espiritual y el liderazgo responsable.