Lección 13: Lo Más Importante

Pasaje Bíblico: Filipenses 1:27.
¿Qué cree usted que es lo más importante que el cristiano puede hacer en la vida? El apóstol Pablo aquí llama la atención de la iglesia en Filipos, y les pide que se mantengan enfocados en lo más importante. Acompáñenos en este programa para descubrir qué es lo más importante según el apóstol Pablo.

Existe una interesante leyenda griega, que algunos dicen que fue escrita por Esopo, de las fabulas de Esopo. La leyenda cuenta acerca de una hermosa mujer llamada Atlanta y su larga lista de pretendientes.

            A Atlanta le encantaba salir a correr… y la leyenda cuenta que ella era la corredora más rápida de su ciudad. Como sus padres insistían que escogiera a uno de sus pretendientes, ella decidió desafiarlos a una carrera. Ella puso una condición, ella se casaría con el hombre que le ganara en la carrera, pero todos los demás que perdieran tenían que morir.

            Una condición de esas, seguro destruye las posibilidades de casarse de cualquiera.

            Sin embargo, un significativo número de jóvenes aceptaron su desafío, convencidos de que podían vencerla. Lo que nadie les dijo a estos jóvenes es que ella los llevaría al centro comercial donde ningún hombre tiene chances de llevarle el ritmo a su mujer… bueno, esa parte la inventé.

            Se inició una carrera, y luego otra, y luego otra más… todos los hombres perdieron sus respectivas carreras y también sus vidas.

            Sin embargo, un joven bastante inteligente llamado Hipomenes se presentó para participar. Él aceptó el desafío, pero antes de entrar a la carrera, el mandó a hacer tres pequeñas manzanas de oro puro. y las guardó entre su ropa.

            La carrera comenzó, y Atlanta rápidamente pasó al frente, pero Hipomenes sacó de su bolsillo una de sus manzanas doradas y la lanzó al frente de ella. El brillo de esa fascinante pieza de joyería llamó su atención, y mientras se detenía para recogerla, Hipomenes pasó al frente y se adelantó. Atlanta se recuperó y volvió a alcanzar a Hipomenes… la carrera estaba ya por la mitad y ella empezó a sacarle mucha distancia nuevamente.

            Otra manzana dorada apareció en el camino y nuevamente Atlanta se detuvo para recogerla, permitiéndole a Hipomenes pasar al frente una vez más.

            La línea de llegada estaba ahora a la vista y Atlanta corrió como nunca antes.

            Mientras ella se acercaba a la meta, vio otra manzana dorada rodando al frente de ella. Mientras dudaba momentáneamente entre recogerla o no, Hipomenes se le adelantó y ganó la carrera.

            La leyenda cuenta que se casaron y vivieron felices para siempre.

            Dudo seriamente esta última parte de la historia… el resto pudo perfectamente haber sucedido – no realmente.

            Como cualquier otra fabula de Esopo, esta viene con una moraleja.

            En este caso podría ser que para ganarle tiene que comprarle alhajas a su mujer.

            Pero lo más probable, es que la moraleja de esta historia es nunca quitar los ojos de la meta… sin importar qué brilla al costado del camino.

            Los filipenses estaban corriendo igualmente… su enfoque estaba en el evangelio de Cristo y la gloria de Dios.

            Pero Pablo esta todavía preocupado. Él sabe que lobos están corriendo alrededor del mismo camino; listos para tomar ventaja de cualquier situación para dañar al rebaño de Cristo.

            Más que nada, Pablo quiere que la iglesia se mantenga enfocada en lo más importante.

            De hecho, esta es la forma en que él comienza estos próximos versículos en Filipenses capítulo 1.

            Pablo levanta su mano para advertirles que necesitan mantener lo más importante, siendo lo más importante.

            Alguien una vez dijo, “lo más importante en la vida es mantener a lo más importante, siendo lo más importante.”

            ¿Y que significa eso para el creyente el día de hoy?

            Muchos concuerdan que Filipenses 1:27 es la tesis principal de la carta de Pablo. Estos próximos versículos proveen la idea principal de Pablo, de la cual dependen el resto de sus ideas.

            Pablo va a enseñarles a estos corredores en la fe, que es lo más importante, cual es el objetivo principal en la vida cristiana.

            Leamos a partir del versículo 25. Y confiado en esto, sé que quedaré, que aún permaneceré con todos vosotros, para vuestro provecho y gozo de la fe, 26 para que abunde vuestra gloria de mí en Cristo Jesús por mi presencia otra vez entre vosotros. Ahora versículo 27. Solamente… Alto.

Solamente.

            Los lingüistas destacan que esta palabra, monos (monoV) en el griego, da la idea de estar levantando el dedo índice en advertencia – para dejar en claro un asunto crítico.[i]

            Podríamos parafrasearlo como, “solo les pido una cosa.”[ii]

            Seguramente cuando usted era pequeño su madre solía decir eso. Cuando ella, antes de salir decía, solo te pido que cuando vuelva… hayas lavado los platos, o hayas hecho tu tarea.[iii]

            En otras palabras, hay algo que toma prioridad sobre todo lo demás.

            Pablo está diciendo, “solo quiero que mantengan esto en mente.”

            Él está apunto de decir cuál es el ítem más importante en la lista de quehaceres cristianos.

            Imagine si Pablo se apareciera hoy y nos dijera, “atención, al momento de vivir su vida cristiana con su familia, en su trabajo, en su colegio… esto es lo más importante que tienen que hacer, más importante que todo lo demás, lo más importante es ___________.

            ¿Que cree que sería? Lo más importante que el cristiano puede hacer. Lo más importante que el cristiano puede tener en mente es ___________.

            Pablo dice que lo más importante es – note el resto del versículo, que os comportéis como es digno del evangelio de Cristo.

            Compórtese de manera digna – a todo esto, esas son 6 palabras en español que traducen una sola palabra en griego.

            Y para entender que era lo más importante en la mente de Pablo, necesitamos entender mejor lo que significa este verbo.

            La palabra que Pablo usa es el verbo politeumai (politeuomai) de la cual sacamos nuestra palabra, política, o alianzas políticas.

            Polis es el sustantivo griego para ciudad.

            Pablo está diciendo, “vivan en sus ciudades como ciudadanos dignos del evangelio de Cristo.”

            Ahora, esto obviamente significaba algo para los Filipenses porque Pablo no necesitó explicar que es lo que significaba ser un ciudadano digno de su ciudad.

            Recordemos que Filipos era una colonia romana. El Emperador le había otorgado el prestigioso “derecho italiano,” el cual concedía el derecho a la ciudad de ser vista como una extensión Roma, la capital del imperio.[iv]

            Como resultado, aquí había un enorme sentimiento de orgullo nacional.

            Al mencionar al emperador romano, los ciudadanos romanos empezarían a elogiarlo rápidamente; al mencionar al imperio romano, estos ciudadanos de Filipos inflarían el pecho con orgullo; a la mención de que alguien era un ciudadano romano, ellos más se enorgullecerían.

            Sabemos a partir de la historia que estas colonias romanas eran consideradas miniaturas de Roma a través del imperio. Estas personas se vestían como si vivieran en la capital del imperio. Ellos vestían togas latinas, hablaban latín, llamaban a sus líderes por nombres en latín y nunca olvidaban su ciudadanía. Sin importar cual lejos estuvieran de Roma, ellos pertenecían a Roma.[v]

            Lo que significaba prácticamente que estos Filipenses eran:

  • Muy devotos a sus ocupaciones para el progreso de su ciudad;
  • Ellos eran muy cuidadosos de no desprestigiar a su polis – su ciudad.
  • Ellos eran leales en sus principios políticos, buscando siempre agradar al imperio.
  • Ellos buscaban vivir de tal manera que fueran considerados ciudadanos honorables.

            Cuando entendemos el contexto, es más fácil hacer la conexión. Pablo está diciéndoles:

  • Sean muy devotos a sus ocupaciones para el progreso de los propósitos de Dios en la Tierra;
  • Sean cuidadosos de nunca desprestigiar a la ciudad de Dios.
  • Sean leales a sus principios basados en la Palabra de Dios
  • Vivan de tal manera que sean considerados miembros honorables de la familia de Dios.

            Pablo está diciéndoles a estos creyentes que tienen que vivir vidas como ciudadanos dignos – y no necesariamente para la ciudad de Filipos – aunque un buen cristiano debería ser un buen ciudadano – sino como ciudadanos que pertenecen a la ciudad de Dios.

            En otras palabras, si los ciudadanos de Filipos eran tan devotos para honrar su reino terrenal, cuanto más devotos tenían que ser a la iglesia del Señor hoy en la tierra y a su Reino venidero.[vi]

            O sea, si un ciudadano de Filipos era tan cuidadoso de no desprestigiar a su ciudad y a su emperador, imagine cuanto más cuidadosos deberíamos ser nosotros de desprestigiar a la iglesia y debilitar la credibilidad del evangelio.

            ¿Qué tipo de ciudadanos somos en relación con nuestra ciudad terrenal? Más aun, ¿qué tipo de ciudadanos somos en relación con nuestro salvador y su ciudad celestial?

            John MacArthur escribe en su comentario de Filipenses – cuando los no creyentes ven a la iglesia y no ven santidad, pureza, y virtud, no hay razón aparente para creer lo que el evangelio dice… cuando el Pastor comete grandes pecados sin consecuencias; cuando los miembros de la iglesia mienten, roban, engañan, corren chismes y rumores, se pelean entre ellos; y cuando las congregaciones parecen no interesarse acerca del pecado y la hipocresía en sus mentes, el mundo es entendiblemente asqueado por las afirmaciones de amor y servicio a Dios de los cristianos, y el nombre de Cristo es deshonrado.[vii]

            Como verá, Pablo está apelando al deseo básico de cada Filipense de representar bien su ciudadanía romana.

            ¿Por qué? Porque lo que las personas pensaban de ellos, era lo que iban a pensar de Roma y del Emperador romano.

            Ahora, no me malentienda, Pablo no está diciendo que necesitamos vivir perfectamente para que seamos dignos de la salvación. Pablo está escribiendo a cristianos aquí.

            No nos portamos bien para poder ir al cielo; nos portamos bien como buenos ciudadanos del cielo porque estamos yendo para allá; y esto es lo más importante que debemos tener en mente mientras viajamos hacia allá – asegurémonos de que el cielo tiene una buena reputación en la tierra por causa de cómo nos comportamos.

            He viajado a muchos lugares en el mundo, y siempre es interesante descubrir como las personas en otros países ven a los estadounidenses.

            Algunos sentían desconfianza, algunos se sentían incomodos con mi presencia, algunos se enojaban y eran desagradables, otros eran generosos y estaban agradecidos con mi presencia.

            Recuerdo una vez que había viajado a un país en particular 20 años atrás. Recuerdo estar caminando a través del mercado en un pueblo junto con uno de nuestros misioneros y note como las personas estaban mirándome… y no eran muy disimuladas al respecto. Ellos sabían que era un turista y sabían que lo más probable era que fuera estadounidense.

            Le pregunte a mi amigo que era lo que estaban pensando acerca de mi como un estadounidense. Él se rio y me dijo, “muchos piensan automáticamente que por el hecho de ser estadounidense eres promiscuo y estas portando un arma.”

            ¿Qué tal tener esa descripción como primera impresión?

            ¿Que piensan las personas acerca de la iglesia – pequeñas extensiones del imperio del Cielo? ¿qué piensan las personas acerca del cristianismo? Lo más probable es que no sea algo muy positivo; y una de las razones primordiales de que esto sea así es porque las personas van a pensar inmediatamente en los cristianos que conocen – y sacar sus conclusiones.

            Mire, si estamos viviendo en una manera digna del evangelio, entonces deberíamos estar demostrando a nuestro mundo que el evangelio tiene el poder de cambiar vidas porque está cambiando la nuestra.

            Y la verdad es que el mundo alrededor nuestro solo logrará conocer el poder del evangelio por lo que ve que el evangelio hace en nosotros.

            Quizá lo ha escuchado antes, pero la verdad permanece – su vida puede ser la única Biblia que la gente alrededor suyo alguna vez lea. Un poema clásico dice:

Usted está escribiendo un evangelio

Un capítulo por día

con las palabras que expresa

y los hechos que realiza

Todos pueden leer lo que usted escribe

Sea fiel o verdadero;

Dígame, ¿cuál es el evangelio

Que usted está escribiendo?[viii]

 

            Pablo escribe aquí – Solo que os comportéis como es digno del evangelio de Cristo.

            ¿Pero como se puede hacer eso prácticamente?

            Pablo va a entregarnos tres aspectos en como conducirnos en una manera digna del evangelio de Cristo.

            Cubriremos el primero de ellos el día de hoy.

            Note la mitad del versículo 27 para que o sea que vaya a veros, o que esté ausente, oiga de vosotros… en otras palabras, Pablo está levantando su dedo y dice, “atención, esto es prioridad, esto es lo que quiero escuchar acerca de sus vidas, sus testimonios y su reputación – ya sea que alguien más me lo cuente o lo vea yo mismo.

            Y a todo esto, comentarios acerca de cada una de las iglesias se estaba difundiendo.

            Pablo escribió a la iglesia en Roma – Primeramente, doy gracias a mi Dios mediante Jesucristo con respecto a todos vosotros, de que vuestra fe se divulga por todo el mundo (Romanos 1:8).

            Él le escribió a la iglesia en Corinto – De cierto se oye que hay entre vosotros fornicación, y tal fornicación cual ni aun se nombra entre los gentiles (1 Cor 5:1).

            A la iglesia en Galacia Pablo escribió que había oído que ellos rápidamente se habían alejado de la doctrina de la gracia de Dios. (Gálatas 1:6-7)

            A la iglesia de Tesalónica escribe, Timoteo volvió de vosotros a nosotros, y nos dio buenas noticias de vuestra fe y amor (1 Tes 3:6).

            Pablo sabia.

            Esto no era una amenaza a todo esto – más adelante, Pablo va a decirle a los Filipenses que él espera regocijarse cuando oiga de ellos.

            Y esto es lo que Pablo quiere oír acerca de esta iglesia y estos creyentes:

 

  1. Déjeme ponerlo de esta forma: Quiero oír que se esfuerzan en mantener continuamente un espíritu de unidad

 

            Note – que estáis firmes en un mismo espíritu.

            Un mismo espíritu se refiere a tener una misma ambición, un propósito común, una meta en común. Lo más probable es que existan paralelos en el pensamiento judío entre el uso de Pablo de tener un mismo espíritu, y el tener una misma mente.

            El punto clave es unidad.

            La iglesia en Filipos tenía que plantarse firme y permanecer en unidad – ellos tenían que comprometerse a mantenerse unidos y buscar reparar cualquier problema que provocara un espíritu de desunión.

            Seguramente no sería fácil.

            No es fácil en una familia y es incluso más difícil en la iglesia.

            Y entre más personas están involucradas, es más difícil aún.

            Haciendo una pequeña investigación encontré la fórmula para determinar el número de relaciones potenciales dentro de una familia de 4 personas. El resultado es 6 relaciones.

  • La relación del padre con su hijo y el del padre con su hija. Ya van 2 relaciones diferentes.
  • La relación de la madre con su hijo y la madre con su hija. Aquí van otras dos relaciones.
  • Luego está la relación de la madre con el padre.
  • Y finalmente está la relación entre el hijo y la hija.

            Seis posibles relaciones – seis distintos tipos de conversaciones – en una familia de 4 personas.

            Si tuviera 7 hijos en una familia de 9 individuos, tendría 36 relaciones distintas.

            Es por eso que los viajes en familia son tan divertidos. Y es por eso que hay al menos una discusión en todo momento – hasta que todos se van a dormir.

            Entre más personas hayan, mas posibilidad hay de que haya conflicto, y más frecuentemente uno tiene que estar reparando la situación.

            A todo esto, si le gustaría hacer la matemática usted mismo, para su negocio o su familia, la fórmula es R (por relación) R = N (número de personas) multiplicado por N-1 y dividido por dos.

            Necesita saber esto para poder entrar al cielo.

            R = N x N-1 /2

            Recuerdo cuando nuestra iglesia en Carolina del Norte llegó a tener 150 personas. Lo recuerdo vívidamente porque no podía entender como tantas opiniones y confusión podía difundirse tan fácilmente y tan rápidamente – aun dentro de 24 horas.

  • Esta es la razón. En una iglesia de 150 personas – incluso si usted no habla con nadie – va a ser indudablemente influenciado por las otras personas.
  • Por la reacción que estas tuvieron cuando usted se sentó a su lado (positiva o negativa).
  • Por cómo estos cantaban. Quizás cantaban muy fuerte y desafinaban o simplemente no cantaban.
  • O si la persona encargada no llegó para ayudar a cuidar los niños.
  • O si alguna persona se acercó a usted y le ofreció una taza de café en el intervalo.
  • O si las personas lo saludaron con amabilidad o no.
  • O si alguien le dijo que estaba orando por usted
  • O si alguien le mandó una carta o lo llamó cuando estaba enfermo
  • O si alguien le dijo su opinión sobre algo que pasó en la iglesia.

            La posibilidad de interacciones, conversaciones y relaciones se disparan mientras el número de personas aumenta.

            Recuerdo estar asombrado siendo un pastor joven de cómo las cosas podían difundirse tan rápidamente – y aquí está el por qué – una iglesia de 150 adultos crea la posibilidad de un poco más de 11.000 relaciones.

            Hoy por hoy, con una iglesia con unos 3.000 adultos, el potencial en nuestra congregación es de 4,5 millones de relaciones.

            Wow.

            Hay alguna duda de porque Pablo levanta su dedo índice y dice, atención, si no están determinados a permanecer en un solo espíritu nunca serán capaces de conducirse como buenos ciudadanos del cielo, como es digno del evangelio de Cristo.

            Lo que Pablo hace aquí para reiterar su punto es hablar con un lenguaje vívido como suele hacerlo.

            El verbo aquí para estar firmes, es una juerga militar que aquí nos pinta un cuadro de los creyentes en Filipos sirviendo juntos en el mismo ejército, peleando contra el mismo enemigo – enemigo que para Pablo representaría la desunión.

            Él dice, estén firmes en un mismo espíritu.

            Y Pablo sabía que ellos sabían que las tropas romanas peleaban contra su enemigo no de forma individual, sino que, en unidad, en filas compactas de hasta ocho soldados de profundidad. Avanzaban juntos, incluso se movían de lado o retrocedían en unidad al sonar de la trompeta o a la orden de su comandante.

            Si ha visto la película de El Hobbit, de Tolkien, ha visto este tipo de organización vívidamente demostrado.

            Además, los escudos romanos estaban hechos de tal forma que permitían que los soldados engancharan sus escudos para aumentar su fuerza y estabilidad.

            La clave era estar en formación – para luchar juntos en unidad – y, un autor escribió, la derrota podía venir como resultado de un solo soldado que se salía de formación, permitiéndole al enemigo infiltrarse.[ix]

            Su fortaleza estaba en su unidad.

            No es de sorprenderse entonces que el Enemigo ha tenido por 2000 años como objetivo principal – dividir y conquistar. Aísla al creyente de la comunión con otros creyentes y el será presa fácil.

            No es de sorprenderse que Pablo a través de esta carta va a insistir en el tema de la unidad del espíritu.

            Este es el punto… hay fortaleza en los números – el enemigo lo sabe – y hay fortaleza cuando estamos juntos en unidad.

            Me encontré con un proverbio etíope en mi estudio que dice, “cuando la tela de araña está unida, esta puede atar a un león.”[x]

            Aquí esta lo más importante – viva acorde a su ciudadanía en Cristo y manifieste el evangelio de Cristo – ¿Como?

            Aquí está la primera forma de hacerlo – Al pertenecer al grupo de creyentes que conforma la iglesia… y mientras esta en el grupo, esfuércese en mantener continuamente un espíritu de unidad.

            Pongamos esto en la vida practica – 8 formas de permanecer juntos en unidad:

  1. Asuma la responsabilidad de ser nutrido espiritualmente a través del estudio de la Palabra y la oración tanto de manera personal como de manera conjunta con otros creyentes.
  2. Participe de las reuniones de su iglesia de forma regular.
  3. Intégrese en algún ministerio de su iglesia y forme amistades.
  4. Ejercite sus dones espirituales y talentos en diferentes áreas de la iglesia.
  5. Apoye al resto de los ministerios a través de la oración.    
  6. Contribuya financieramente a la iglesia de forma consistente y generosa.
  7. Cuéntele a otros acerca de su relación con Cristo y apoye a otros que proclaman el evangelio alrededor del mundo.
  8. Responda positivamente al liderazgo de la iglesia mientras tratan de dirigir a la iglesia en unidad.

            A todo esto, lo que acabo de leer es una lista de cosas que hemos animado a nuestra iglesia que haga durante los años.

            Pero en realidad esta lista fue hecha por otra iglesia en California, pastoreada por Chuck Swindoll.

            La verdad es que estos principios bíblicos funcionan en California… y funcionan en cualquier otro lugar del mundo de la misma manera. Estas son formas de revelar si uno está firme en unidad, en un mismo espíritu.

            Así que Pablo escribe aquí – no olviden que están en una batalla – solamente les pido que no peleen unos contra otros – peleen lado a lado, juntos contra los enemigos de la cruz, no con espadas de metal – sino con la espada del espíritu y el escudo de la fe – con la vivida y vibrante demostración de sus propias vidas que han sido cambiadas… y el evangelio de Cristo que sigue cambiando vidas aun el día de hoy.

            Y sin importar que pase… Pablo levantara su dedo índice para enfatizar – sin importar lo que el mundo, la carne o el diablo arroje en el camino mientras corremos juntos nuestra carrera – sin importar que brilla o luce interesante, o suena interesante… asegúrese de que nada lo distraiga de la meta que tenemos al frente – el evangelio y la gloria de Dios.

            Cubriremos la siguiente forma de vivir digno del evangelio en nuestro próximo programa.  

 

 

Este manuscrito pertenece a Stephen Davey, predicado el día 11/01/2015

© Copyright 2015 Stephen Davey

Todos los derechos reservados

 

[i] The Expositor’s Bible Commentary: Volume 12, editors, Tremper Longman III & David E. Garland (Zondervan, 2006), p. 208

[ii] G. Walter Hansen, Pillar New Testament Commentary: The Letter to the Philippians (Eerdmans, 2009), p. 93


[iii] Steven E. Runge, Philippians: A Visual and Textual Guide (Lexham Press, 2014), p. 31


[iv] Dennis E. Johnson, Philippians (P & R Publishing, 2013), p. 90

[v] William Barclay, The Letters to the Philippians, Colossians, and Thessalonians (Westminster Press, 1975), p. 30

[vi] Adapted from John MacArthur, Philippians (Moody Publishers, 2001), p. 85


[vii] Ibid


[viii] Sam Gordon, Philippians: An Odyssey of Joy (Ambassador, 2004), p. 62

[ix] Expositor’s, p. 209


[x] Life Application Bible: Philippians, Colossians & Philemon Editor, Grant Osborne (Tyndale, 1995), p. 43