Lección 13: Un Modelo para las Mujeres Casadas

Lección 13: Un Modelo para las Mujeres Casadas

Pasaje Bíblico: Tito 2:4-5
Mientras que el mundo menosprecia la vejez, la Biblia nos dice que las mujeres mayores son un tesoro con el potencial de impulsar un cambio positivo en la iglesia – especialmente, en la vida de las mujeres jóvenes. En este estudio, veremos dos aspectos de vida que las mujeres mayores deben modelar y enseñarle a las más jóvenes.

Introducción

Según un articulo del diario, el envejecimiento de la población de los EE.UU. ha pasado a ser un factor a considerar. En los últimos 25 años, el grupo de más de 50 años creció en un 20%, mientras que los menores de 50 crecieron solo en un 4%. Estas estimaciones sugieren que la edad promedio del país, que en el año 1989 era de 33 años, ahora ha pasado a ser de 40.

Un periodista escribió que este cambio va a traer consigo un cambio cultural extremadamente significativo.[i]

Y eso puede ser algo bueno.

Para cuando la persona llega a los 50 años, generalmente reconoce que la vida se trata de mucho más que una carrera… un automóvil… un armario lleno de ropa de marca, una tarjeta de crédito con un limite muy alto, o un bolsillo lleno de dinero.

Cuando uno llega a los 50, descubre que las personas son mucho mas importantes de lo que uno pensaba. Uno observa a otras familias, mira a los niños jugar, y se pone a pensar si sus padres comprenden el tesoro que tienen en sus manos. Uno se pone a pensar en cuan rápido pasa el tiempo.

Cuando uno es joven quiere que el tiempo pase rápido. Recuerdo que cuando era adolescente no veía la hora de poder conducir. Yo creía en el rapto, si, pero no quería que sucediera antes de mi graduación y luego, mi primer empleo. Era como si el tiempo no se movía lo suficientemente rápido.

Pero cuando uno se pone un poco más viejo, ya no quiere que el tiempo pase rápido. Uno no quiere que llegue el día de mañana. Uno anhela que el tiempo vaya mas lento… es por eso que a uno le gusta mirar fotografías, porque esos momentos quedaron como congelados en el tiempo y no pueden desvanecerse completamente.

Como verá, para cuando uno cumple 50 años, se da cuenta que sus días están contados.

Si usted tiene mas de 50, tal vez este pensando – que mensaje más deprimente.

Mire, en cuanto a lo que a Dios concierne, cuando usted se da cuenta que sus días están contados, allí es cuando usted comienza a desarrollar un mayor nivel de sabiduría en la vida.

El Salmista escribió: “Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría.” –Salmo 90:12

Saber que nuestros días están contados es tierra fértil en la que la sabiduría y el discernimiento van a crecer y dar fruto.

Y ese tipo de sabiduría y perspectiva, de parte de otro creyente mayor es algo que la iglesia en la actualidad necesita desesperadamente.

De la misma manera que la cultura mundana que nos rodea, los creyentes mayores pueden pasar a ser la fuerza que moldee una cultura dentro del cuerpo de Cristo.

De hecho, Pablo le dijo a un joven pastor llamado Tito que pusiera en orden a las congregaciones en la isla de Creta – y que pusiera lideres para guiar y alimentar a las iglesias.

Luego, Tito tenia que desafiar a los hombres y mujeres mayores de las iglesias a vivir vidas que marquen una diferencia en los mas jóvenes.

Los hombres mayores tenían que ser un modelo de madurez, dignidad, fe y amor – y las mujeres mayores tenían que ser un modelo de piedad, y de un carácter dulce y moderado.

En otras palabras, las mujeres ancianas no tenían que pensar que sus vidas tenían menos valor al cumplir mas años, sino que todo lo contrario, cuanto mas años, más valiosas.[ii]

Ellas tenían que impulsar un cambio cultural significativo en la iglesia – principalmente, en la vida de las mujeres jóvenes.

El día de hoy retomamos nuestro estudio de Tito, en el capitulo 2, versículo 3, donde Pablo desafía a las mujeres mayores a entrenar a las jóvenes a amar a sus maridos e hijos.

Tenga en mente que Pablo simplemente esta lidiando con la norma. El proceso normal en nuestro mundo es que los hombres y las mujeres se casen y luego tengan hijos o escojan adoptar.

Sabemos por lo que dice 1 Corintios 7, que Pablo veía al celibato como algo noble. El no consideraba a los solteros como personas incompletas en Cristo. De hecho, si uno fuera incompleto como persona o en su caminar con Dios por no estar casado, entonces Jesús también lo fue – Él nunca se casó.

En otros pasajes, Pablo habla en cuanto a las oportunidades especiales que tiene el soltero para servir a Dios.[iii]

Entonces, sáquele el máximo provecho al estado civil que tenga –sea casado o soltero- aproveche las oportunidades únicas que tiene para servir a Dios y vivir para Su gloria.

Ahora, en sus cartas, Pablo lidia con el patrón que Dios ha establecido para el matrimonio y la familia- que según el plan de Dios, va a impactar a la mayoría de las personas en la iglesia.

Y el plan de Dios para el matrimonio y la maternidad va a ser cada día menos valorado por la sociedad, ya que esta se aleja cada vez mas del diseño divino y escoge sus propios deseos egoístas y depravados.

Francamente, el matrimonio como institución, en nuestra sociedad actual, esta en pleno proceso de desaparición.

Tanto pastores como evangelistas solían predicar que el mayor peligro para la institución del matrimonio era el divorcio. Pero por lo que podemos ver en la actualidad, el mayor peligro del matrimonio es que simplemente deje de existir.

Las parejas en la actualidad simplemente conviven. No se casan.

Según un censo reciente, en los Estados Unidos, menos de la mitad de los adultos están casados.

Para poner esto en perspectiva, en el año 1960, el 72% de los adultos estaban casados. En la actualidad, esa cifra es de tan solo el 50 por ciento.

¿Por qué? Por varios motivos. Uno de ellos es el fracaso, o incluso la incapacidad de los jóvenes de madurar y aceptar las responsabilidades del matrimonio.

Quizás se acuerde que mencione en otro estudio que la Academia Nacional de Ciencias ahora dice que la adolescencia en los varones – ese periodo entre la pubertad y la adultez – va desde los 12 años hasta los 30.

Un periodista lo puso de la siguiente manera: “Estamos rodeados de personas mayores que no han dejado la niñez.”[iv]

Pero el motivo más grande de la falta de compromiso, creo yo,  es la decadencia moral de la sociedad.

El número de parejas que conviven están superando rápidamente a las que se casan.

La gente piensa “para que comprometerme de por vida si puedo tener los beneficios físicos y financieros del matrimonio y hasta tener uno o dos hijos sin tener que cerrar las otras opciones.”

De hecho, investigación revelo que 4 de cada 10 personas piensan que el matrimonio se está volviendo obsoleto.

Nada de esto es sorpresa ¿no es así?

Nosotros simplemente estamos observando los efectos naturales de una cultura que se ha resistido a la Biblia y que ahora finalmente está logrando quitarla de la vida pública.

Y cuando la Biblia es puesta a un lado, lo que también se pone de lado es el estigma ligado a un estilo de vida que la Biblia llama pecaminoso.

Hoy ya no se le ve nada de malo a la convivencia. De hecho, hace poco vino una pareja a mi oficina, y me dijeron que no le veían nada de malo a vivir juntos –desde el punto de vista financiero, tenia sentido, y también veían los beneficios de conocerse más antes de estar casados. ¿Quién era yo para decirles que estaban viviendo en pecado? De hecho, antes que nuestra reunión terminara, el muchacho me dijo que ambos se sentían más cerca de Dios que nunca antes.

Un autor secular escribió que en la actualidad estamos presenciando un movimiento tectónico en las sensibilidades de nuestra sociedad.[v]

Es decir, se ha dado vuelta la escala de valores – lo que esta bien y lo que esta mal se ha puesto de cabeza.

Bienvenidos a la isla de Creta.

Este era su estilo de vida también. Los hombres mayores eran inmaduros y egoístas, se rehusaban a madurar y actuar según su edad; las mujeres mayores eran chismosas y dadas al alcohol, los jóvenes solo se interesaban en ellos mismos y las jóvenes abandonaban a sus familias para vivir en libertad.

Suena muy parecido al siglo 21, ¿no le parece?

Al igual que Tito y estas iglesias de la isla de Creta, nosotros no estamos viviendo en una sociedad post cristiana, sino en una sociedad pre-cristiana.

Ellos no sabían cual Dios era el Dios verdadero –y en la actualidad pasa lo mismo- la sociedad de aquel entonces y la actual, no considera a la Biblia mas sagrada que al libro del Mormón o el Corán. Jesús es un profeta más.

¿Sabe que significa esto?

Significa que vivimos en tiempos emocionantes.

Vivimos en una era fenomenal en la que podemos demostrar el evangelio de Cristo y el estilo de vida bíblico que este mundo ha abandonado y que en su interior anhela.

Ahora la luz puede brillar más que nunca.

Luego de comentar acerca de la depravada cultura Cretense, Pablo le da a Tito la solución divina e inspirada.

El versículo 4 nos informa que gran parte de la solución para transformar vidas es que las mujeres mayores animen e instruyan a las más jóvenes.

A propósito la frase ‘que enseñen’ allí, no aparece en ningún otro lado en el Nuevo Testamento. Se trata de una palabra griega que significa, literalmente, “entrenar.”

La sociedad en que vivían había puestos los valores cabeza a abajo… y ahora, ellas debían de ponerlos de vuelta en su lugar.

Lo que Pablo esta haciendo aquí, es entregar el plan de estudio que las mujeres mayores deben usar para instruir a las jóvenes.

Y hay 7 asignaturas en este plan de estudio. Las primeras seis vienen pares.

El primer par de asignaturas lo encontramos en el versículo 4: ‘enseña a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos…”

Estas asignaturas tienen que ver con la relación de las jóvenes con sus familias – con los vínculos familiares.

El segundo par se encuentra en el versículo 5: “enséñales a ser prudentes, y castas…” Estas asignaturas tienen que ver con su reputación en el mundo.

El tercer par hace referencia a su rol en el hogar; deben de cuidar sus casas y ser amables/bondadosas.

Y la última frase del versículo 5 muestra la motivación que deben tener. Allí leemos: “…sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada.”

Ahora, el primer par de asignaturas nos enseña:

El modelo para la relación de la esposa con su familia.

Pablo escribe, en el versículo 4, “que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos…”

La palabra traducida ‘amar’ es la palabra griega ‘philos’ que habla de mostrar afecto o incluso amistad. Es la única oportunidad en que esta palabra aparece en el Nuevo Testamento.

Y parece extraño ¿no? ¿Cómo puede Pablo ordenar una emoción? ¿Cómo puede uno obligarse a tener afecto?

Lo que Pablo esta dando a entender aquí es que uno puede aprender a amar. De hecho, uno puede vivir y pensar de tal manera que las emociones terminan siendo guiadas y gobernadas por pensamientos justos y no al revés.

Y Dios nos dice esto con mucha frecuencia, ¿No es así?

  • El nos manda a “Estar siempre gozosos.” 1Tesalonicenses 5:16
  • El nos manda a responder con gozo ante las pruebas –Santiago 1:2
  • El nos manda a dar gracias por todo –1Tesalonicenses 5:18- porque esa es la voluntad de Dios.

Todos esos son mandamientos bíblicos que involucran nuestras emociones – emociones que puede que no tengamos en el momento. Pero nosotros debemos obedecer sus mandamientos, y nuestras acciones bíblicas terminan produciendo emociones bíblicas.

Nosotros vivimos en una sociedad pecaminosa donde todo esta cabeza abajo – con razón la cultura nos enseña que nuestras acciones deben ser resultado de nuestras emociones –que nuestras emociones son el motor que empuja nuestras acciones.

Dios revierte todo eso. El dice, por medio de Pablo, sometan su mente al Señor – y actúen según Sus mandamientos – y sus emociones eventualmente lo van a acompañar.

Y así es justamente como nosotros criamos a nuestros hijos. Ellos quieren dulces y caramelos para el desayuno… pero esa no es una buena idea.

Me acuerdo cuando mi madre me obligaba a comer las verduras. Yo no lo quería hacer…  no sentía que las necesitaba…y además no me gustaban. Pero yo no podía elegir. Ella sabia lo que yo necesitaba, mas allá de que si a mi me gustaba o no. Y tomó mucho tiempo para que mis sentimientos cambiaran al respecto.

Aun me acuerdo de una noche cuando mi esposa se fue a una actividad de la iglesia y yo me ofrecí para cocinarle a los chicos. ¿Qué tan difícil podía ser? Mi esposa me facilitó las cosas dejándome una comida congelada que yo simplemente tenia que echar en agua hirviendo y listo.

Bueno, herví el agua, abrí la caja, y al dejar caer el contenido note que la comida incluía unas arvejas.

Yo pensé, “oh! Porqué tenían que ponerle arvejas … no las quiero comer… pero los chicos me van a estar mirando.”

Pero segundos después, las arvejas flotaron a la superficie de esa olla de agua hirviendo y pude sacarlas fácilmente con una cuchara. ¡Que alivio! ¡Lo tomé como una señal del amor y la providencia de Dios!

Pero sabe que, ahora tengo otro sentir en cuanto a las verduras y ensaladas – las frutas y la fibra.

Ahora les veo el valor –y actúo diferente, sin importar como me siento.

Como verá, el mandamiento de Pablo es que las mujeres actúen de tal manera que su actuar produzca un sentimiento. Pero el actuar en obediencia siempre va primero.

Permítame parafrasear este versículo – Pablo escribe, Esposas jóvenes y madres, permitan que las mujeres mayores las entrenen para amar y actuar con afecto y amor para con sus hijos y maridos.

A todo esto, este mandamiento era aún más difícil y profundo en el contexto judío de aquella época.

En nuestra cultura pensamos que el orden es el siguiente: Primero el amor, luego el matrimonio.

Pero, para muchos de estos creyentes leyendo esta carta en el siglo primero, él orden había sido al revés. Primero fue matrimonio y luego el amor.

Eso se debe a que los matrimonios en aquel entonces eran planeados por los padres – los padres escogían una mujer para su hijo desde la niñez o desde antes que ambos se conocieran. Y muchas veces se conocían el mismo día de la boda.

Y esto se sigue practicando en muchos países, especialmente en Asia y el medio oriente. Uno de los diáconos de nuestra iglesia, que es de India, conoció a su esposa solo unos días antes del casamiento.

Conozco a un matrimonio de África que se conoció un día antes de la boda – sus padres creyentes habían planeado la unión.

Primero venía el matrimonio, después uno aprendía a amar al otro.

Un autor escribió que el criar hijos en la isla de Creta era el deber exclusivo de la mujer. La esposa criaba a los hijos con muy poca ayuda de su marido. Es por eso que la mujer podía fácilmente formar resentimiento en contra de su marido y transferir ese resentimiento también a sus hijos.[vi]

En cambio, estas mujeres jóvenes y madres creyentes, ahora son parte de la gran familia llamada “la iglesia” – un grupo de pecadores redimidos que tienen comunión los unos con los otros.

Y al formar parte de la iglesia, estas jóvenes ahora debían aprender acerca de las responsabilidades y prioridades en el hogar. El hogar cristiano era algo completamente nuevo para ellas, así que las mayores debían enseñarles y entrenarlas en esta nueva forma de pensar.

Y Pablo les dice “Así es como pueden marcar una diferencia par el evangelio y la gloria de Dios.”

La jóvenes necesitarían ser entrenadas para pensar diferente; de la misma manera que lo necesitamos el día de hoy.

En un canal de noticias vi que un grupo de abogados mando hacer un cartel publicitario en la ciudad de Chicago que decía: “La vida es corta – Divórciese.”  En tan solo una semana, la intendencia quitó el cartel luminoso afirmando que era debido a unas fallas técnicas. La verdad es que habían recibido muchas quejas.

El grupo de abogados se defendió diciendo lo siguiente: “Para nosotros el aviso es simplemente honesto y perspicaz. Es verdad, la gente no esta feliz, y hay muchas opciones allí afuera – divórciese y continúe con su vida.”[vii]

Ahora, si el propósito principal del matrimonio es la autosatisfacción, entonces ese anuncio tiene sentido. O sea, si el matrimonio y los hijos le están aguando la fiesta, deshágase de ellos.

Pero Pablo esta derribando ese tipo de pensamiento – El matrimonio es para glorificar a Dios y santificarnos en el proceso – esta es una nueva forma de pensar, una nueva lista de prioridades, una nueva disciplina, con mandamientos nuevos y privilegios nuevos.[viii]

Y si bien estas jóvenes ahora son creyentes, ellas descubrirían que el cristianismo no es un remedio milagroso en contra de los desafíos matrimoniales y en la crianza de hijos.

El matrimonio sigue siendo la unión de dos pecadores y todo hijo también lo es.

Y para que las cosas sean aun más difíciles, el verbo amar esta en presente, de manera que esta es una decisión diaria para toda madre joven y esposa.

Ahora, se que esto es conocimiento general, pero déjeme decirlo de todas formas. Las madres tienen el trabajo más difícil del mundo ¿no es así? La frase ‘una madre trabajadora’ es mas que redundante. Las madres por lo general, trabajan demasiado y no se las valora o paga como corresponde. Cuando los niños no se sienten bien o están enfermos, jamás llaman al padre – llaman a mamá.

Las madres prácticamente no tienen descanso ¿no es así?

La semana pasada leí acerca de una madre que no se sentía muy bien. Su hijo de 15 años llego a casa de la escuela y la encontró tendida en la cama. El se preocupó al verla y le dijo: “Mama ¿estas enferma? La madre respondió: “La verdad, no me siento muy bien.” El muchacho dijo: “Oh, mami, lo siento mucho. Luego de una larga pausa dijo: “Mira mamá, no te hagas problema con la cena, yo ya soy grande y fuerte, así que voy a poder llevarte en brazos hasta la cocina.”

Aquí esta el desafío de Pablo. Este es un llamado a las madres y esposas para que dejen a un lado los valores de la cultura de este mundo – valores que exaltan el amor propio y el egoísmo – y que desarrollen un amor sacrificial, un amor por los demás.

Me pareció interesante que, mientras que en Efesios, Pablo habla de cómo el marido debe de amar a su esposa; aquí en Tito, él habla de cómo la esposa debe de amar a su marido e hijos.

Y esta es la sorprendente verdad que va en contra de lo que la sociedad nos enseña. En las palabras de un autor, “El amor maduro y piadoso no es una emoción que crece sola, sino una disciplina que se debe de ejercitar.”[ix]

Mujeres mayores: En primer lugar, entrenen a las jóvenes en cuanto a sus relaciones familiares.

Segundo, sean un modelo e instruyan a las jóvenes en cuanto a su reputación en el mundo.

El modelo para la reputación de la esposa en el mundo

El segundo par asignaturas aparece en el versículo 5. Estas madres y esposas jóvenes deben den aprender a ser prudentes y puras.

A propósito, de la misma manera que en Tito 1 las calificaciones del Anciano proveen un estándar de vida para los varones, sean ancianos o no, estos atributos aquí son para todas las mujeres, no solo las casadas y que tienen hijos.

De hecho la palabra traducida como “prudente” es la misma palabra que usa Pablo para desafiar a los ancianos y a la iglesia en general.

Esta palabra da la idea de tener un pensamiento equilibrado – un pensamiento correcto.

Estas mujeres son desafiadas a pensar bíblicamente –y luego actuar en base a ello.

Pablo también agrega que deben ser castas o puras.

La palabra casta, originalmente hacía referencia a un ritual de limpieza o purificación, pero con el tiempo pasó a tener un sentido moral.[x]

Este es un mandamiento a no andar buscando llamar la atención con su cuerpo – a ser discreta y modesta; lo que implica que una mujer casada aún puede sentirse atraída a otros hombres y querer atraer a otros hombres. El estar casada no le da la libertad de excusarse y decir: bueno, me voy a vestir como quiera – y si me miran, no es mi problema.

Las mujeres mayores deben enseñarle a las jóvenes que ellas no solo pertenecen a una familia física, sino que también a una familia mucho más grande, la de la fe, y es honroso vivir de forma modesta y discreta – contribuyendo a la pureza de la iglesia, y ella misma desarrollando una reputación de ser pura y piadosa.

Como verá, Pablo sabia que las jóvenes necesitaban entender esto, ya que provenían de una cultura sensual, que presumía de su libertad de expresión sexual – donde incluso la prostitución era legal.

Estas mujeres llegarían a la iglesia y necesitarían instrucción de parte de mujeres mayores en este tema tan práctico.

Muchas de esas mujeres jóvenes no tenían madres creyentes y modestas que fueran de ejemplo para ellas.

Es por eso que Pablo entrega este desafío en cuanto a la apariencia exterior de las mujeres, en 1 Timoteo 2:9, “Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con pudor y modestia.”

Y aquí me gustaría dirigirle la palabra a mis hermanas en Cristo, en nombre de mis hermanos en el Señor.

Tal vez se sorprenda al saber cuantos hombres en la iglesia me han dicho algo como: “Si las mujeres tan solo supieran cuan difícil, a veces, es enfocarse en Dios mientras uno tiene que pelear con la carne porque una hermana viene vestida de cierta manera! Muchas veces uno se va de la reunión sintiéndose más derrotado que edificado.”

Entre paréntesis, esto no es ninguna excusa para como uno debe de actuar o pensar como hombre. Por más provocativa que se vista una mujer, eso no le da el derecho a decir: “bueno, no lo puedo evitar. Es su culpa.” ¡No! No lo es y nunca va a ser su culpa. Usted es responsable por sus propias acciones y por lo que deja entretener en su mente. De lo que estamos hablando aquí, es de la importancia de la modestia para vivir vidas puras y piadosas. No se confunda.

A propósito padres y maridos… usted puede hacerle un gran favor a sus hermanos en Cristo al darle a sus esposas e hijas su opinión personal. ¡Despierte! Fíjese de la forma en que se viste su hija. Piense en lo que produce la manera en que se viste su esposa – en especial al salir de casa para ir a adorar a Dios con la familia de la fe.

Con tacto y prudencia, usted puede decirle: Querida, te ves hermosa vestida así, pero si vas a la iglesia así, a los hermanos les va a ser muy difícil cantar: “Santo, santo, santo.”

Especialmente en la iglesia, vaya un paso más allá en cuanto a la modestia, reflejando visiblemente la pureza y la piedad que debe tener en su interior. 

Este era un mensaje sorprendente y nuevo para los creyentes en Creta; porque para las mujeres en la isla, y a través de todas las generaciones, tienen la tentación de querer llamar la atención.

Así que Pablo básicamente esta diciendo, “Mire, si usted quiere llamar la atención de la manera adecuada –si quiere dejar una marca como Cristiana – si quiere que la conozcan por las cosas correctas, asegúrese de no ponerle más atención a la manera en que luce, que a la manera en que vive.”

En medio de este plan de estudio para las mujeres jóvenes que han llegado a la fe en Cristo y se han convertido en parte de la iglesia, Pablo nos entrega un principio maravilloso.

Como verá, estas jóvenes llegaron a la iglesia con un pasado, con una historia que nada tenia que ver con la pureza.

Ellas llegaron teniendo sus propias luchas y muchas seguramente se estaban preguntando cuan profundamente la sangre de Cristo las había limpiado.

Pablo le dice a las ancianas, ‘enséñenle a estas jóvenes a ser puras.”

¿Sabe lo que esto significa? – esto es maravilloso –Pablo les esta diciendo a esta mujeres, “Puede que ustedes no hayan tenido la reputación de ser puras, pero ahora si pueden tenerla.”

Probablemente, la palabra ‘pureza’ nunca estuvo asociado a su estilo de vida, pero eso puede cambiar. Ese es el evangelio de la gracia.

No importa cual sea su pasado, la palabra “pura” puede ser parte de su nueva reputación.

Aquí tenemos entonces el nuevo principio para una vida santa…las mujeres mayores van a proveer el ejemplo de una vida santa… y el Espíritu Santo va a proveer el poder para llevar a cabo esa vida santa.

En nuestro próximo programa estaremos estudiando las otras asignaturas en este plan de estudio para la jóvenes… pero por ahora, estas son las maravillosas noticias para las jóvenes:

  • Ellas llegaron a la iglesia sabiendo mucho acerca de la moda; pero ahora van a aprender acerca de las convicciones;
  • Llegaron a la iglesia habiendo vivido para ellas mismas, pero ahora van a aprender a cómo vivir para los demás;
  • Llegaron a la iglesia buscando la aprobación y las miradas de los hombres, pero ahora van a comenzar a desarrollar un anhelo por la aprobación y la mirada de Dios.
  • Van a aprender como la pureza debe de afectar cada área de su vida, y debe estar presente tanto en el interior como en el exterior.
  • Van a ser desafiadas a ser prudentes – a actuar, no en base a emociones, sino convicciones;
  • Van a comenzar a aprender a tratar y amar a sus hijos y maridos con un amor sacrificial.

Las mujeres mayores deben de invitar a las jóvenes a observarlas y aprender… Miren, así es la vida que Dios quiere para ustedes – una vida que pone los valores y prioridades que el mundo ha tergiversado devuelta en su lugar – una vida que también les traerá satisfacción, porque así es como Dios las diseño – una vida que las llevará a depender del poder del Espíritu Santo y vivir para la gloria de Dios

 

Este manuscrito pertenece a Stephen Davey

© Copyright 2012 Stephen Davey

Todos los derechos reservados

 

 

[i] Statistics from U.S. News & World Report, 2/13/89, and American Demographics, 5/89 

[ii] Life Application Bible Commentary: 1 & 2 Timothy/Titus (Tyndale, 1993), p. 260 

[iii] David Campbell, Opening Up Titus (Day One Publications, 2007), p. 58 

[iv] Diana West, The Death of the Grown-Up (St. Martin’s Press, 2007), p. 3

[v] Ibid. 

[vi] Adapted from Gene A. Getz, The Measure of A Christian: Studies in Titus (Regal Books, 1983), p. 114 

[vii] ABCnews.com, “Billboard Turns Heads” (5/7/07) 

[viii] Warren W. Wiersbe, Be Faithful: 1 & 2 Timothy & Titus (Victor Books, 1984), p. 110 

[ix] Kitchen, p. 520 

[x] Ibid.