Lección 3: Siendo Prudente

Lección 3: Siendo Prudente

Pasaje Bíblico: 1 Samuel 18:1-30.

Saúl engaña a David, abiertamente se resiente con él e incluso usa su cabeza para practicar tiro al blanco. Entonces, ¿por qué David continuamente le concede el beneficio de la duda? Veamos juntos el sorprendente ejemplo de prudencia, control y sabiduría celestial de parte del joven David – un ejemplo no solo para admirar, sino también para imitar.

Transcripción

Introducción

Por generaciones, la humanidad no solo ha querido conocer el origen del universo, sino que también ha tratado de entender de donde surgió lo que el ser humano tiene, y que lo separa del resto de los seres vivientes.

En una sola palabra – sabiduría.

¿De donde vino la sabiduría? – esta habilidad de considerar racionalmente el pasado, el presente y el futuro; la habilidad de aplicar conocimiento en cuestiones sociales, éticas, financieras, morales y espirituales.

En la Biblia, la palabra sabiduría simplemente se refiere a aplicar conocimiento, y según la Biblia, existen dos fuentes de sabiduría.

Puede ser positiva o negativa – buena o mala.

El apóstol Santiago escribió. Pero si tenéis celos amargos y contención en vuestro corazón, no os jactéis… porque esta sabiduría no es la que desciende de lo alto, sino terrenal, animal, diabólica. Porque donde hay celos y contención, allí hay perturbación y toda obra perversa. Luego él contrasta esta sabiduría terrenal al agregar, Pero la sabiduría que es de lo alto es primeramente pura, después pacífica, amable, benigna, llena de misericordia y de buenos frutos, sin incertidumbre ni hipocresía. (Santiago 3:13-17)

Y a la verdad, no puedo pensar en una ilustración más clara de lo que escribe Santiago que lo que vemos en 1 Samuel 18

Así que vayamos allí mientras continuamos estudiando la vida del cantautor, pastor de ovejas, y futuro rey de Israel, David.

 

¿Cómo Demostrar Sabiduría de lo Alto?

Ahora, en este capítulo en particular, vemos que después de haber vencido a Goliat, David empieza a progresar y prosperar – demostrando sabiduría de lo alto; mientras el Rey Saúl, empeora – demostrando la sabiduría del mundo.

Y mientras vamos a través de este capítulo, lo que quiero es hacer y responder la pregunta – ¿que significa andar prudentemente? ¿Como se ve eso en la vida real?

El concepto de prudencia y sabiduría va a aparecer varias veces aquí… 1 Samuel 18 va a responder esa pregunta con al menos tres características determinantes. Permítame darle la primera característica.

Primero, andar prudentemente significa

  1. Responder a la promoción con humildad – versículos 1-5.

Ahora, tenga en mente que cuando llegamos al capítulo 18, David acaba de ganar popularidad instantáneamente… él se convierte en toda una celebridad de la noche a la mañana… él es el joven que mató al gigante.

La verdad es que David está en boca de todos… él es el tema de conversación y el objeto de admiración de todo Israel.

Estoy de acuerdo con un autor que escribió que muy pocas personas serían capaces de asimilar todo lo que le pasó a David en un solo día.[i]

Era fácil que todo eso se le subiera a la cabeza… pero no lo hizo

Y lo que pasa después solo hace que el auge de David sea aún más destacable. Note el versículo 1:

Aconteció que cuando él hubo acabado de hablar con Saúl, el alma de Jonatán quedó ligada con la de David, y lo amó Jonatán como a sí mismo. saltémonos al versículo 3. E hicieron pacto Jonatán y David, porque él le amaba como a sí mismo. 4Y Jonatán se quitó el manto que llevaba, y se lo dio a David, y otras ropas suyas, hasta su espada, su arco y su talabarte.

Lo que ocurrió aquí fue un acto simbólico que representaba varias cosas; primero, representaba que una profunda amistad se había formado.

Jonatán sabía que David arriesgo su vida por la gloria del Dios de Israel – así que él piensa, “ese es mi deseo también… eso es lo que está en mi corazón.”

A todo esto, el fundamento para una amistad profunda no es una gran compatibilidad o una buena química, sino el tener una fe en común, una misma confianza en Dios.

Ah, y para aquellos que tergiversan este texto y enseñan que David y Jonatán tuvieron una relación en inmoralidad, todo lo que necesita hacer es leer el resto del capítulo.

Esta misma palabra para amor aparece 4 veces distintas.

  • En el versículo 16 se nos dice que todo Israel y Judá amó a David
  • En el versículo 20 y 28 se nos dice que Mical amó a David – y eso fue antes de que se casaran
  • Y el versículo 22 el verbo aparece otra vez cuando leemos que todos los siervos del rey amaban a David.

El punto es obvio ¿o no? Todos amaban a David.

Además, esta palabra hebrea en particular para amor tiene una connotación política.[ii]

Es importante entender que cuando Jonatán se sacó el manto y se lo dio a David – y cuando se nos dice que los sirvientes de Saúl y la hija de Saúl amaron a David – esto significó que él estaba depositando su afecto y lealtad en el que creía, iba a ser heredero al trono de Israel.

Más adelante en capítulo 20, Saúl va a acusar a su hijo, Jonatán, de haberle entregado el reino a David, cuando lo que debería estar haciendo es lo que los otros reyes en el mundo hacían, eliminar la competencia.

Y aunque nos estamos enfocando en la vida de David, permítame destacar por un momento la increíble humildad, la fe y la valentía de Jonatán; uno de los personajes más heroicos y a la vez ignorados en toda la Biblia. Todos aman a David… el joven que mató al gigante… aún Jonatán.

Note el versículo 5. Y salía David a dondequiera que Saúl le enviaba, y se portaba prudentemente.

Quizás su traducción dice, y prosperaba.

Esa es la palabra hebrea sakal, que a veces es traducida conducirse sabiamente.

En la Biblia, el éxito y la prosperidad nunca tienen nada que ver con el dinero, o la fama – tienen que ver con un caminar prudente y sabio.

El profeta Samuel está diciéndonos realmente, Y David salía y se comportaba sabia, prudentemente, donde fuera que Saúl lo enviaba.

Ahora, ¿que hace Saúl con un hombre tan valiente, humilde, leal, sabio y prudente como David? Versículo 5, Y lo puso Saúl sobre gente de guerra,

David es ascendido a comandante – de un día para otro, David se encuentra en la cima.

Y en ningún lugar en este capítulo va a encontrar que David está mirándose en el espejo y diciendo, “mírate David, eres el mejor.”

Él no manda un mensaje a casa a sus hermanos – especialmente a Eliab, que lo había menospreciado solo unos días antes al decirle que era un bueno para nada, y que apenas sabia cuidar un par de ovejas.

¿Que tienes que decir ahora Eliab?

Querido oyente, portarse prudentemente significa ser capaz de discernir cual es el momento indicado para mantener la boca cerrada.

El problema aquí es que todos los demás están abriendo la boca. Note el versículo 6:

Aconteció que cuando volvían ellos, cuando David volvió de matar al filisteo, salieron las mujeres de todas las ciudades de Israel cantando y danzando, para recibir al rey Saúl, con panderos, con cánticos de alegría y con instrumentos de música.

Esto era común en la antigüedad. Normalmente las mujeres salían a saludar a los guerreros triunfantes con danzas y tamboriles, cantando y dirigiendo la celebración de la victoria.

Ellas dirigían un canto antifonal – lo que significa que un grupo de mujeres lideraba la canción, y otro grupo de mujeres repetía lo que el otro decía. Y según los historiadores, estas mujeres no andaban improvisando y cantando lo primero que se les venía a la mente. Ellas eran bien organizadas. Este era como un desfile, donde habían danzas y cantos preparados. Tristemente, la mayoría de estas costumbres fueron olvidadas a través de los siglos.

Típicamente, en cada cultura hay canciones y danzas simbólicas, que representan el corazón y alma de la nación. Israel no era la excepción.

Aquí, en 1 Samuel, vemos un desfile de victoria donde los artistas empiezan a presentar sus canciones – y empiezan a cantar una canción que es definitivamente nueva – note el versículo 7, Y cantaban las mujeres que danzaban, y decían: Saúl hirió a sus miles, y David a sus diez miles.

¡Ay no! Eso sí que le aguó la fiesta a Saúl.

Mire el versículo 8. Y se enojó Saúl en gran manera, y le desagradó este dicho, y dijo: A David dieron diez miles, y a mí miles; no le falta más que el reino. 9Y desde aquel día Saúl no miró con buenos ojos a David.

No se nos dice si David notó la sospecha y el cambio de actitud de Saúl hacia él.

Lo que si sabemos a partir de este capítulo es que David no está diciendo nada. Estoy seguro de que David no está tarareando la canción cerca del rey tampoco… “¿viste lo que están cantando todos? La canción es bastante pegadiza, ¿no crees Saúl? Cantémosla juntos.”

Portarse prudentemente significa responder a la promoción con humildad.

  1. Segundo, portarse prudentemente significa tolerar con gracia las debilidades de los demás – versículos 6-11.

Note el versículo 10, Aconteció al otro día, que un espíritu malo de parte de Dios tomó a Saúl, y él desvariaba en medio de la casa. David tocaba con su mano como los otros días.

Ahora detengámonos por un momento porque necesitamos entender mejor que es lo que pasa aquí. Dios no ha hecho un pacto con un demonio para que atormente a Saúl.

La palabra espíritu puede ser traducido viento o aliento. Este es el soplo de Dios. La palabra malo o dañino puede ser traducido desagradable o miserable.[iii]

Las palabras “tomó a Saúl” o “se apoderó de Saúl” viene de una palabra que significa agobiar. Job incluso uso esta palabra en sus momentos de desesperación, la cual es traducida aterrorizar (Job 3:5).[iv]

Lo que le pasa a Saúl es que se está sintiendo desesperado, deprimido, miserable, aterrado ya que está cayendo en convicción por su pecado. Él está pensando en sus planes fallidos, y su reino que esta por perder y en la promesa de Samuel de su familia no reinaría sobre Israel.

Ahora, él ve como el joven David emerge, y parece ser la persona que va a tomar su lugar.

El día después del desfile, Saúl se ve sombrío… las palabras de esa nueva canción están resonando en su cabeza – están golpeando su ego y su orgullo – lo están comiendo vivo.

Aristóteles escribió, “un hombre envidioso siente dolor por el éxito de los demás.”[v]

Francis Bacon escribió, “la envidia es la peor de todas las pasiones… nunca se toma un día libre.”[vi]

Así que, que es lo que Saúl hace para tratar de silenciar su consciencia. ¿Que es lo que hacemos cuando no confesamos nuestros pecados y nuestros planes terminan de arruinarse?

Le subimos el volumen a la radio ¿o no? Escuchamos algo de música. Prendemos la tele. Buscamos algo para que nos distraiga …  algo que nos ayude a olvidar… cualquier cosa.

Saúl está agobiado por la miseria y la convicción traída por el mismo soplo de Dios.”

¿Donde esta ese músico? Tráiganlo que necesito ahogar mi consciencia.

El único problema es que Saúl conoce muy bien al músico.

Note el versículo 10. y Saúl desvariaba en medio de la casa. David tocaba con su mano como los otros días – él estaba tocando un arpa pequeña, lo que sería el antecesor de la guitarra – y tenía Saúl la lanza en la mano. Y arrojó Saúl la lanza, diciendo: Enclavaré a David a la pared. Pero David lo evadió dos veces.

Esta escena ya es sorprendente de por sí… pero las últimas palabras son increíbles. ¡Dos veces!

En otras palabras, David no evadió una lanza sino dos. Lo más probable es que esta frase nos dice que Saúl arrojo su lanza en dos ocasiones distintas. Más adelante, Saúl va a arrojar su lanza contra su propio hijo, Jonatán.

Aquí vemos la triste progresión de una envidia descontrolada.

El dolor… que lleva al Odio… el cual lleva a la Enemistad… la cual lleva al Daño.[vii]

Dolor – odio – enemistad – daño.

Pero, nuevamente, David no abre su boca… Él no se desquita, él no insulta. No vemos palabras duras de enojo o descontento en contra de este rey mal agradecido.

Ahora, basados en el ejemplo de David, la pregunta es, ¿que debe hacer cuando alguien le arroja una lanza?

Bueno, primero esquívela.

Y luego… tan importante como esquivar la lanza es asegúrese de no agarrarla y arrojársela a quien se la tiró.

Querido oyente, hay muchas personas que tienen una habilidad increíble para arrojar lanzas… no aprenda de ellas.

No tome ese camino. Al final, el más dañado termina siendo aquel que arroja la lanza.

Permítame en este momento aclarar que, lo más probable es que David no sabe que es lo que está pasando por la mente de Saúl. Él no sabe porque lo está atacando… El pasaje nos explica a nosotros las intenciones de Saúl, pero no nos dice que David las entendía.

Al parecer, las personas en el palacio y aún David mismo creían que todos estos incidentes, donde a Saúl se le daba por tirar su lanza, eran simples rabietas de Saúl – debe ser la presión – o, está de mal humor otra vez – o, no puede evitarlo – o, eso no significa nada, es cómo él reacciona normalmente.

Un autor dijo que todos habrían creído que el rey Saúl era peligroso, pero no malicioso.[viii]

Solo el lector recibe la información exclusiva – nosotros sabemos que está pasando por la mente de Saúl.

Y lo que esto significa, es que David fue paciente con Saúl – aun cuando lo usaron como blanco de práctica.

La verdad es que queremos que las personas nos den el beneficio de la duda; queremos que las personas nos entiendan cuando hemos tenido un día difícil, queremos que las personas sean pacientes con nosotros, pero que no nos pidan que hagamos lo mismo a cambio.

Pero cuando lo hace, usted está comportándose prudentemente.

Portarse prudentemente significa: Responder a la promoción con humildad, tolerar las debilidades de otros con gracia… Una tercera característica que me gustaría señalar es que:

  1. Portarse prudentemente significa someterse a la providencia de Dios sin quejarse.

Hasta ahora, David ha surgido como la Cenicienta. Aparte del rey loco que le tira lanzas, a David le ha ido muy bien. Ahora él está en el palacio, su mejor amigo es el hijo del rey, él ha cambiado su túnica de pastor por vestimentas reales. El está entrenándose en el arte de la guerra y cada vez que el lidera una batalla, él gana.

Sin embargo, en el resto del capítulo, David va a enfrentar unos serios problemas. El más significativo es que Saúl juega con David y no cumple sus promesas.

Hay un intervalo de tiempo en este capítulo para que David salga en varias campañas militares contra los filisteos. Saúl sin duda ha retrasado el premio que había prometido para el que derrotara a Goliat – darle su hija en matrimonio. Para este punto, Saúl solo está esperando que David muera en batalla.

Pero el versículo 14 nos informa que David se conducía prudentemente en todos sus asuntos, y Jehová estaba con él – 15 Y viendo Saúl que se portaba tan prudentemente, tenía temor de él. 16Mas todo Israel y Judá amaba a David, porque él salía y entraba delante de ellos.

Esta es terminología militar que nos indica que David salía en campañas y volvía exitosamente a Israel. Saúl está pensando, “¡Cuando se le va a acabar la suerte!”

Y cuando Saúl le dice que es tiempo de cumplir su promesa, David, en humildad, le responde que él no es digno de ser su yerno – de ser parte de la familia real.

Pero note el versículo 19, Y llegado el tiempo en que Merab hija de Saúl se había de dar a David, fue dada por mujer a Adriel meholatita.

Todos amaban a David… pero ahora todos saben que no todos aman a David.

Y David a propósito se resiste a contraatacar, a demandar lo que es suyo, a defender su honor.

De hecho, para ese entonces David podría haber generado una revuelta… Goliat había avergonzado a Saúl delante del pueblo y él había salvado el día; Saúl ya había perdido su reputación en el palacio por sus constantes rabietas, arrojando lanzas y todo lo demás, mientras que todos en el palacio aman a David; además, todos saben que Dios esta con David, él ha estado ganando todas las batallas que sale a pelear. Si él quería, él podría haber destronado a Saúl en ese momento, pero no lo hace, sino que se comportó prudentemente.

Ahora, cuando Saúl cree que todos se han olvidado de David, su hija menor se enamora de Él. Versículo 20. Pero Mical la otra hija de Saúl amaba a David; y fue dicho a Saúl, y le pareció bien a sus ojos.

¿Por qué?

Bueno, no necesita pensarlo mucho, ya que la respuesta la encontramos en el versículo 22. Y mandó Saúl a sus siervos: Hablad en secreto a David, diciéndole: He aquí el rey te ama, (olvida las lanzas que te he tirado y como te humille con lo de mi otra hija) y todos sus siervos te quieren bien; sé, pues, yerno del rey.

David le pregunta, ¿como? soy un hombre pobre.

Evidentemente el Rey no había cumplido otra de sus promesas. Él había dicho que él le daría riquezas a aquel que venciera a Goliat.

Soy pobre, dice David… no puedo pagar la dote, el precio para casarme con tu hija.[ix]

No hay problema David… no quiero dinero, tengo una propuesta.

Solo ve a matar 100 filisteos, córtales el prepucio y tráelos aquí. Esa va a ser tu paga, esa va a ser tu dote.

Eso suena bastante raro… y asqueroso, por qué no decirlo, también; pero esta era una práctica común en la antigüedad – para evidenciar la cantidad de guerreros que habían derrotado en el campo de batalla.[x]

Saúl asume que David no va a salir con vida.

¿Y que es lo que hace David? El versículo 27 nos informa que David dobló la demanda del rey.

Aquí están los cien que querías rey Saúl… y aquí tienes otros cien más.

Saúl ya no tiene más excusas, él se siente avergonzado por la valentía de David, él sabe que tiene ahora tiene que darle su hija al hombre que más teme en todo el mundo.[xi]

Mire el versículo 29, tuvo Saúl más temor de David; y fue enemigo de David todos los días.

No pase por alto la última línea… Saúl fue enemigo de David continuamente… todos los días.

Y él no va a acabar con esta enemistad hasta que uno de ellos este muerto.

 

Conclusión

Leí hace poco una leyenda griega. Contaba acerca de una carrera olímpica en donde un joven atleta, muy orgulloso terminó en segundo lugar. Él estaba devastado.

El había entrenado duro por mucho tiempo y el creía que era el mejor atleta de todo el mundo. El recuerdo de ese día lo atormentaba día a día, la carrera debería haber ganado, el rostro de su oponente, la multitud celebrando y coreando el nombre del ganador. El ganador de la carrera era de su mismo pueblo, y para su mayor decepción, cuando volvió, encontró que los líderes de la ciudad habían acordado levantar una estatua en honor al medallista de oro.

Colocaron esta estatua sobre una gran plataforma. El atleta más reverenciado de la ciudad se encontraba a unos 6 metros de altura, en el medio de la ciudad.

La envidia lo estaba comiendo vivo. Él no podía soportar ver esa estatua – el recordatorio diario de su fracaso – así que decidió destruirla. Rápidamente ideó un plan en su mente.

Cada noche, cuando no quedaba nadie en el centro de la ciudad, él se escabullía hasta donde estaba la estatua y tan silenciosamente como podía, cincelaba la base, esperando debilitarla de tal manera que eventualmente – quizás durante un fuerte viento o una tormenta, la estatua se cayera y se rompiera en mil pedazos.

Una noche, mientras él cincelaba la base con más enojo y envidia que nunca, se le pasó la mano. La pesada estatua repentinamente cayó sobre este joven y lo mató. Los aldeanos lo encontraron la mañana siguiente aplastado debajo de la estatua de la persona que él había odiado tanto.

Obviamente la moraleja de esta leyenda griega es el hecho de que este hombre, en realidad, había empezado a morir desde hace mucho tiempo, centímetro a centímetro, cincelada a cincelada, hasta que se convirtió en la victima de su propia envidia.

Esta es una ilustración del rey Saúl.

Para el final de este capítulo, Saúl debería haber estado más feliz y David debería haber estado resentido y enojado.

Sin embargo, vemos totalmente lo opuesto.

Saúl está carcomido por la envidia, el miedo y la ira, mientras que David se casa y se convierte en un miembro de la familia real.

El versículo 30 termina este capítulo con la misma frase con que comenzó. David tenía más éxito – allí está esa palabra nuevamente – David se portaba prudentemente, mas sabiamente que todos los siervos de Saúl, por lo cual se hizo de mucha estima su nombre.

Portarse prudentemente significa

  • Responder a la promoción con humildad
  • Tolerar la debilidad de otros con gracia
  • Y someterse a la providencia de Dios sin quejarse

Que el Señor nos ayude a demostrar estas características en nuestra vida.

 

 

Este manuscrito pertenece a Stephen Davey, predicado el día 19/01/2014

© Copyright 2014 Stephen Davey

Todos los derechos reservados

 

 

[i] Charles R. Swindoll, David: A Man of Passion & Destiny (Word Publishing, 1997), p. 51


[ii] Expositor’s Bible Commentary: Volume 3, ed. Frank E. Gaebelein (Zondervan, 1992), p.707


[iii] William Gesenius, trans. by Francis Brown, S.R. Driver & Charles A. Briggs, A Hebrew and English Lexicon (Clarendon Press, 1980), p. 948

[iv] Swindoll, p. 28


[v] Pulpit Commentary, p. 353


[vi] Ibid


[vii] Adapted from W. Phillip Keller, David I: The Time of Saul’s Tyranny (Word Books, 1985), p. 98


[viii] Dale Ralph Davis, Expositions of the Book of 1 Samuel: Volume 2 (Baker Books, 1994), p. 54


[ix] Expositor’s, p. 711


[x] Ibid, p. 712


[xi] Adapted from Keller, p. 100

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