Lección 25: Genuinos y Probados

Lección 25: Genuinos y Probados

Pasaje Bíblico: Tito 3:12-15
Mientras concluimos el estudio de la epístola de Pablo a Tito, encontramos cuatro características de un creyente auténtico, genuino… sincero. Estas son características que debemos y podemos desarrollar en nuestras vidas solamente por la gracia de Dios.

Introducción

Hace varios años leí un artículo, donde una mujer contaba acerca de la colección de frascos de su madre. A lo largo de los años, su madre había recolectado más de 200 tipos diferentes de frascos de vidrio antiguos. Tenía frascos de todo tipo de tamaños, formas y colores.

Ella escribió que, en la colección de su madre, no hay dos frascos exactamente iguales. Los bordes desiguales y las burbujas en el vidrio son marcas de distinción, antigüedad y valor.

La pieza más grande de su colección es una jarra de vidrio elaborada en Europa del Este. La pieza más pequeña de su colección es un hermoso frasco hecho a mano que una vez contuvo un perfume. De hecho, su madre había desenterrado este frasco mientras buscaba objetos antiguos en un área que solía ser una parada de carruajes. El pequeño frasco aún contenía el leve aroma del perfume a pesar de que tenía más de 100 años de antigüedad.

Si alguna vez ha visto uno de esos programas de televisión que hablan de antigüedades, seguramente se ha sorprendido al descubrir todos los diferentes tipos de pistas y evidencias que prueban si un objeto es una antigüedad genuina o una imitación reciente.

Las apariencias ciertamente pueden ser engañosas.

Esta mujer escribió que su madre usaba una prueba simple que le ayudaba a probar si sus frascos eran de vidrio antiguo genuino. Ella los ponía a la luz del sol.

Un frasco antiguo genuino cambia de color cuando se lo expone a la luz directa del sol durante un período de varias semanas. El vidrio en objetos de más de 100 años a menudo contenía un alto nivel de manganeso (un químico metálico que se agrega para hacer que el vidrio fuera un poco más transparente). Los rayos del sol provocan una reacción química, y un cristal verde pálido, por ejemplo, cambia a una variedad de tonos púrpura.

Así, la autenticidad del objeto se revelaba al ser examinada por la luz del sol.

Si viajara en el tiempo hasta los días del apóstol Pablo, descubriría que la gente de esa época usaba cerámica y barro para casi todo. Y ellos tenían una prueba similar para determinar que las ollas, tazas, recipientes y otro tipo de objetos fueran bien hechos.

Los alfareros deshonestos cubrían las grietas y los defectos de sus productos llenándolos de cera. La persona que comprara ese producto al interior de una tienda no podría notar la diferencia.

Era común que las personas llevaran esa pieza de cerámica a la calle y la observaran a la luz del sol. Cualquier lugar cubierto o relleno de cera quedaba en evidencia ya que tenía un color más claro.

Evidentemente, este era un problema tan común en esos días que los comerciantes honestos estampaban sus productos con las palabras latinas, sine cera.

Sine significa sin y cera significa cera, cerilla, barniz. “Mi producto no tiene cera. Aún así, quizás quiera probarlo para asegurarse.”

Sine cera se convirtió eventualmente en nuestra palabra sincero o sincera: No tiene cera. No esta tratando de aparentar ser algo que no eres.[i]

Significa ser real, auténtico, genuino. Que es lo opuesto a ser falso, superficial, hipócrita. De acuerdo con esta analogía, ser “sin cera” significa ser abierto y honesto en cuanto de sus grietas y defectos. Usted trata resolver esos defectos en lugar de intentar cubrirlos.

Este es el cristianismo auténtico, “sin cera… probado a la luz del sol.” ¡Qué maravillosa resolución para cada creyente y para toda la iglesia!

Una Vida Auténtica

Al concluir esta serie titulada, “cristianismo sobresaliente” – que también nos lleva a los versículos finales de la carta de Pablo a Tito – es lógico que encontremos características de autenticidad – sinceridad.

¿Cómo se ve el auténtico carácter espiritual? ¿Cómo luce y cómo actúa realmente un corazón genuino por Dios? ¿Cómo puede saber si es un artículo genuino?

Lo que quiero hacer es ir a través de este último párrafo de Tito y simplemente señalar cuatro formas de determinar autenticidad. Vamos a tomar la vida de Pablo y sostenerlo a contraluz y ver qué podemos averiguar.

Le invito a que abra su Biblia en Tito 3:12. La Palabra de Dios dice: Cuando envíe a ti a Artemas o a Tíquico, apresúrate a venir a mí en Nicópolis, porque allí he determinado pasar el invierno.

Ahora bien, este versículo es un sermón en sí mismo. Hay mucho de que hablar aquí. Pero estoy decidido a terminar estos cuatro versículos hoy.

Mientras comenzamos nuestro estudio, necesito mencionar que hay personas – autores – supuestos eruditos de la Biblia – que creen que el apóstol Pablo era un sabelotodo…un líder dogmático, insensible, serio, nunca inseguro.

En ninguna parte esa idea es refutada de mejor manera que en la forma en que Pablo termina sus cartas.

Estas exudan calidez, amabilidad y gracia; y también revelan las marcas de una vida auténtica.

La primera marca de cuatro es la siguiente:

  1. La autenticidad se revela a través de dilemas honestos

¿Era Pablo un hombre insensible? ¿Estaba él siempre seguro de sí mismo? ¿Era Pablo esa clase de líder que nunca se detenía para cuestionarse?

Este versículo responde a todas esas falsas acusaciones. Note primeramente que Pablo dice: “Cuando envíe a ti Artemas o Tíquico…

Detengámonos allí un momento, ¿qué acaba de revelar Pablo? Por favor note esa pequeña palabra traducida “o.” Artemas o Tíquico. En el idioma original, esta es una frase indefinida; lo que significa que Pablo no ha tomado una decisión. Él no lo sabe.[ii]

Cuando envíe a Artemas o Tíquico… Pablo está admitiendo con completa transparencia que él no estaba seguro.

Y en lugar de maquillar su falta de certeza con un lenguaje más espiritual, como: “Tito, hay dos excelentes candidatos para el pastorado que estoy evaluando actualmente”; él simplemente dice las cosas como son… sin cera para suavizarlo o aparentar que la decisión fue menos difícil de lo que fue.

Para todos los que están a cargo de un ministerio, una escuela o una casa, ¿no es maravilloso escuchar a Pablo decir: “Tito, aquí tengo dos posibles candidatos para que te sustituyan en la isla de Creta, pero en este momento, no estoy seguro de cuál es el mejor candidato.”

“Todavía no lo sé…” Implicando, “lo estoy pensando.” Lo que implica a su vez, “todavía estoy orando por eso.”

Mire, el Espíritu de Dios está inspirando las Escrituras a través del Apóstol Pablo, y dentro de las Escrituras inspiradas encontramos la admisión de Pablo de que Dios no lo ha guiado claramente en todas las áreas de su ministerio.

Pablo, ¿de verdad quieres que otros sepan eso? Sí, creo que si. Tito, todavía no sé qué voy a decidir. Dios no me ha mostrado el camino aún.

Personalmente, fue muy alentador descubrir esa verdad en esta carta.

A veces se me acercan algunos hermanos y me preguntan: “¿Qué libro vamos a estudiar después?” “No lo sé.” Y me miran como, “Pensé que tenías todo el año planificado.”

Quizás usted se esté preguntando

  • ¿Qué clase tomo a continuación?
  • De hecho, ¿a qué universidad debo ir?
  • ¿Qué casa debo comprar?
  • ¿De qué manera educaremos a nuestros hijos?
  • ¿Con cual chico me caso?
  • ¿Cuál trabajo acepto?

Está bien admitirlo y decir: “¡No estoy seguro de cual camino tomar!” Eso es ser autentico, honesto, sincero.

Y con este tipo de admisión vendría un apoyo en oración. Obviamente, Tito habría comenzado a orar para que el Señor le diera a Pablo la sabiduría para elegir al hombre indicado para enviar a Creta. Las consecuencias serían tremendas para estas iglesias en la isla.

Necesitaban al hombre adecuado en el momento adecuado.

Ahora bien, ¿qué sabemos acerca de estos dos candidatos, Artemas y Tíquico?

 Artemas es un nombre derivado del nombre de la popular diosa de la fertilidad, Artemisa. Su nombre probablemente significaba “Regalo de Artemisa”; lo que significa que probablemente sus padres consideraron su nacimiento como un regalo de esta diosa. Así que lo nombraron en honor a ella.[iii]

Lo que esto nos dice es que Artemas nació en un hogar gentil e idólatra; pero evidentemente llegó a la fe más tarde en la vida.

Uno solo puede imaginarse los cambios drásticos que deben haber habido en su vida. No sabemos nada sobre sus padres o su pasado, pero sí sabemos que este joven gentil, nombrado en honor a una diosa, es ahora uno de los hombres de confianza de Pablo en la iglesia primitiva.

El otro candidato mencionado aquí en el versículo 12 es Tíquico, cuyo nombre significa “Afortunado.” Él también es un gentil que llegó a la fe en Jesucristo.

Mientras que Artemas no aparece en ningún otro lugar del Nuevo Testamento, Tíquico aparece varias veces. Pablo lo menciona en Colosenses 4:7 y lo describe como su hermano amado, siervo fiel y esclavo del Señor. En Efesios 6:21 se le llama hermano amado y ministro fiel.

Él incluso entregó la carta de Pablo a la iglesia de Colosas y acompañó a Pablo en uno de sus viajes misioneros (Hechos 20). Obviamente, él era uno de los compañeros más cercanos de Pablo.

Es posible entender por qué ambos hombres serían buenos candidatos. Como Tito, ellos son creyentes gentiles, bien entrenados para llevar a cabo el ministerio entre estos descendientes de piratas en la isla de Creta.

No hay que estudiar el ministerio de Pablo en tanta profundidad antes de descubrir que él constantemente buscaba hombres piadosos para entrenar y discipular.

E.M Bounds comentó acerca de este enfoque de Pablo cuando dijo: “La iglesia siempre está buscando mejores métodos; Dios busca mejores hombres. Lo que la iglesia necesita hoy no es más maquinaria, sino más hombres a quienes el Espíritu Santo pueda usar; y el Espíritu Santo no fluye por métodos, sino por hombres. Dios no unge planes, Él unge [personas].” Él escribió eso en 1880, y la verdad permanece el día de hoy.[iv]

Al reunir las pistas, descubrimos que Pablo terminó enviando a Artemas para que tomara el lugar de Tito, ya que encontramos que Pablo envió a Tíquico para reemplazar a Timoteo en Éfeso (2 Timoteo 4:12).[v]

El punto que quiero destacar aquí es esta marca de autenticidad que fácil podría pasarse por alto. Pablo confiesa abiertamente que, en este momento, él no sabe cual hombre enviar. Él incluso lo admite en esta inspirada carta que sería leída por toda Creta y el resto del mundo unos 2000 años después.

¡Pablo es sincero!

Él ha rechazado el pedestal que esperaba que él supiera siempre lo que era correcto, que nunca admitiera su incertidumbre, que nunca se mostrara indeciso. Aquí, él hace todo lo contrario al agregar esta frase que revela que no tiene todo resuelto de antemano.

La autenticidad se revela a través de dilemas honestos.

  1. En segundo lugar, la autenticidad se revela a través de la sumisión a Dios

Leamos de nuevo el versículo 12: Cuando envíe a ti a Artemas o a Tíquico – note esto – apresúrate a venir a mí en Nicópolis, porque allí he determinado pasar el invierno.

En otras palabras, no he decidido a qué hombre enviar a Creta, pero he decidido pasar el invierno en Nicópolis.

Pero fíjese en esto (este párrafo habría sorprendido a Tito). Pablo ha descrito las cosas que Tito ha estado haciendo: organizar las iglesias, nombrar ancianos, desafiar a los hermanos a crecer en madurez y demostrar un cristianismo sobresaliente… y ahora, en las últimas líneas de esta carta, Pablo dice: “Ah, y por cierto, Tito, no vas a estar allí por mucho más tiempo.”

“A ver. Un momento. ¿Qué? ¿Me he perdido algo?”

Tito podría haber argumentado: “Estoy totalmente arraigado aquí. Creta se ha convertido en mi hogar; He sufrido las luchas de poder y me he enfrentado a los falsos maestros. Las iglesias ahora han nombrado ancianos y el fruto recién está comenzando a brotar. ¿Qué quieres decir con que estás enviando a Artemas o Tíquico para que ocupen mi lugar?

¡Este es mi hogar!

Esta carta fue una bomba para los planes de Tito. Sus planes habían sido interrumpidos. Por lo que nos dicen otros pasajes, Tito luego será enviado a Dalmacia – otro campo misionero difícil – pero irá sin quejarse después de que el Apóstol le informe que su ministerio allí pronto llegará a su fin.

Sostén a Tito a contraluz y descubrirás a un creyente auténtico, que cederá ante la autoridad del apóstol Pablo y la dirección de Dios a través de él. Él está dispuesto a que Dios interrumpa sus planes.

Querido oyente, Dios no solo ordena los pasos de Sus hijos; él también ordena sus paradas.

De hecho, lo que Pablo no sabe es que los planes están a punto de cambiar para ambos.

¿Notó dónde esperaba Pablo pasar el invierno? En Nicópolis. Nicópolis estaba en el lado sur de Grecia. Era una ciudad fundada por el primer emperador romano, Octavio, para celebrar su victoria sobre Marco Antonio y Cleopatra.[vi]

Al comparar los planes de Pablo aquí en Tito con sus planes revelados a los creyentes en Roma, encontramos que Pablo tenía la intención de pasar el invierno en Nicópolis, luego viajar para servir a los creyentes en Roma antes de pasar rápidamente a servir a Cristo en España. (Romanos 15:23-28)

España era considerada como el fin del mundo civilizado. España estaba produciendo algunas de las mentes más importantes de su generación, como Séneca, el primer ministro de Roma era de España; el poeta Lucano era español.

Pablo estaba ansioso por llegar a España.

“Tito, puede que no esté seguro en cuanto a quién enviar a la isla de Creta, pero sí sé que pasaré este invierno en Nicópolis y luego iré a Roma y finalmente en España”.

Y Dios dijo: “Mmm… no”

Artemas llegó a Creta y Tito se fue a Nicópolis, pero mientras él estaba en camino, los planes de Pablo también estaban a punto de ser interrumpidos, porque Pablo sería arrestado cuando iba de camino a Nicópolis, o bien, después de haber llegado.

Luego, lo llevarían a Roma – y no a la iglesia, sino a la cárcel… y nunca llegaría a España.

Tanto los planes de Tito como los de Pablo fueron interrumpidos.

Y si hoy los pusiera a la luz, observaría la marca de un cristianismo auténtico y sobresaliente. Ellos no hicieron más que ceder ante la Autoridad más alta, Su Señor Soberano, mientras Él ordenaba sus pasos y sus paradas.

Tony Snow, un creyente que se desempeñó como secretario de prensa del presidente George W. Bush, luchó contra el cáncer antes de fallecer hace unos años atrás. Cuando le preguntaron qué lecciones espirituales estaba aprendiendo en su batalla contra el cáncer de colon, él respondió con una sonrisa: “Nosotros queremos vivir vidas con una facilidad predecible – senderos lisos hasta donde alcanza la vista… pero a Dios le gusta salirse de la carretera.”[vii]

Cuan cierto

Pablo será arrestado, y Tito, luego de ver alterados sus planes de invierno, comenzará un ministerio completamente nuevo en Dalmacia.

Y piense en esto, todos sus planes van a cambiar en cuestión de meses… y ellos no lo sabían.

¿No es eso el cristianismo? Es decir, ¿el cristianismo real?

Caminos lisos y senderos despejados y de pronto un giro rápido y antes de que se de cuenta, Dios lo saca del camino. Allí no hay caminos pavimentados. No tiene un mapa… sin GPS… ninguna gasolinera a la vista. ¡Eso no es lo que esperaba!

¿Qué hay en su lista de expectativas, querido oyente?

  • Bueno, tengo tres cosas que planeo hacer este año.
  • Hay dos cosas por las que nunca espero pasar;
  • Planeo retirarme de mi trabajo en 5 años – o 10 – o 15.
  • Estoy planeando graduarme y comenzar una carrera en este campo en particular.

No hay nada de malo en planificar – Pablo y Tito estaban metidos hasta el cuello – pero sus planes estaban escritos en lápiz, y cuando Dios tomó su divina goma de borrar y borró algo aquí y reescribió algo allá, ellos se sometieron a la sabiduría y al plan de Dios.

Cuando decimos que estamos siguiendo a un Señor soberano, debemos entender que eso significa que lo vamos a seguir… incluso cuando nos saca de la carretera… incluso cuando evidentemente no nos debe una explicación por los cambios en el camino, y en las paradas que decide agregar al camino.

Eso es cristianismo auténtico.

Se revela a través de dilemas honestos.

Se revela a través de la sumisión a Dios.

  1. En tercer lugar, la autenticidad se revela mediante actos de solidaridad.

Pablo escribe en el versículo 13, A Zenas intérprete de la ley, y a Apolos, encamínales con solicitud, de modo que nada les falte.

Ahora Pablo sorprende a la iglesia pidiendo una ofrenda especial.

Zenas y Apolos son evidentemente los mensajeros de esta carta. Ambos están en camino a otros lugares para ministrar.

Pablo quiere que Tito aproveche esta oportunidad para enseñarle a la iglesia cómo ofrendar a unas personas, que hoy en día llamaríamos misioneros – personas que están sirviendo a Cristo en otro lugar.

Quizás, esto no estaba en su presupuesto.

Y además, ¿quien es Zenas? No lo sabemos. No se menciona en ningún otro lugar de la Biblia. Su nombre es griego, así que sabemos que es un gentil convertido.

Y ¿Notó que Pablo agrega una referencia al hecho de que es un “intérprete de la ley”? Pablo usa la palabra griega típica para un abogado.[viii]

Este es el único abogado cristiano mencionado en el Nuevo Testamento; lo que no significa que solo un abogado se salvó. Lo que sí significa es que este era un creyente que era un abogado y estaba tan comprometido con el evangelio que decidió hacer, lo que llamaríamos, un viaje misionero.

Él usó los beneficios de su carrera para ayudar a difundir el evangelio.

Es una gran bendición para mí contar con abogados en nuestra propia iglesia, que hacen exactamente lo mismo. Usan sus habilidades y sus conexiones para ayudar a otros creyentes y promover el evangelio de Jesucristo.

Pablo también menciona a Apolos aquí. Él ya era bien conocido por la comunidad cristiana. Él fue un talentoso orador y apologista de la iglesia en el primer siglo. De hecho, Pablo reprendió a la iglesia en Corinto por dividirse en cuatro grupos: Había quienes decían, “Nosotros seguimos a Pablo”, mientras que otros decían, “Nosotros seguimos a Apolos”; otros decían: “Nosotros seguimos a Pedro” y los realmente espirituales decían: “Oh, nosotros solo seguimos a Jesús.”

Pero, de cualquier manera que lo mire, estos eran los líderes que todos conocían y seguían. Y Apolos no solo estaba en la lista, estaba en la lista junto a Pablo. Él tenía la misma reputación.

Pero, aquí está la marca de un cristiano sincero y auténtico. Pablo le dice a la iglesia que ayuden a Apolos y a Zenas en todo lo que puedan. “Anímenlos.”

Ni una palabra en cuanto a los distintos grupos en Corinto; ni un comentario despectivo acerca de Apolos. Ayúdenlos.

El cristianismo auténtico es:

  • Revelado a través de dilemas honestos;
  • Revelado por medio de la sumisión a Dios
  • Revelado mediante actos de solidaridad
  1. La autenticidad se revela a través de discípulos unificados.

Note el siguiente versículo donde Pablo escribe, Y aprendan también los nuestros a ocuparse en buenas obras para los casos de necesidad, para que no sean sin fruto.

Parte de una vida auténtica es servir desinteresadamente a los demás, satisfaciendo necesidades urgentes.

Y Pablo agrega aquí este maravilloso incentivo: cuando vives para los demás, nunca tendrás que preguntarte si has vivido una vida infructuosa.

Ocuparse en buenas obras se refiere a un estilo de vida solidario, no a un destello momentáneo de servicio. Lo que significa que esta persona no cuenta en voz alta, “muy bien, acabo de hacer otra buena acción. Necesito conseguir una más antes de la cena.”

¿Ha pensado alguna vez en el hecho de que Dios nunca diseñó a los manzanos para que contaran sus manzanas? Uno, dos, tres… trescientas manzanas. Listo, llegué a 300. Eso es todo para mí este año. No, solo dan fruto.

Pablo efectivamente le dice a la iglesia en Creta, “Trabajen juntos. Sirvan juntos para satisfacer las necesidades urgentes. Ese es el camino a una vida fructífera.”

Pablo también está insinuando aquí que nuestro servicio más fructífero podría ser ayudar a otra persona a dar fruto. Y esto no va a suceder de forma natural. ¿Notó su comentario en cuanto a que hacer buenas obras sería algo que la iglesia necesitaría aprender a hacer?[ix]

Tenemos que aprender a realizar buenas acciones. Sus hijos tendrán que aprender a realizar buenas obras.

No es que uno lo empieza a hacer automáticamente cuando cumple 6, 16, 21, 40 o 60 años.

El cristianismo auténtico es algo que se aprende, y se vuelve a aprender, y luego lo practica… y luego practica un poco más.

No lo sé… me da la impresión como que Pablo llega al final de la carta y hace la pregunta: “¿A quién le importa?”

 ¿A quien le importa los demás hermanos?

  • ¿Quién se va a preocupar por los otros?
  • ¿Quién cuidará de los que sirven a Cristo y pasan por la ciudad?
  • ¿Quién cuidará de los jóvenes que se preparan para el ministerio como Artemas y Tíquico?
  • ¿Quién cuidará de las personas dentro y fuera de la iglesia?
  • ¿Quien va a satisfacer las necesidades urgentes de los demás?

¿A quien le importa?

Obviamente, la respuesta es: a los creyentes auténticos; a las iglesias auténticas.

Pablo termina con el versículo 15, donde se despide de la iglesia en Creta con sus saludos habituales.

Todos los que están conmigo te saludan. Saluda a los que nos aman en la fe. La gracia sea con todos vosotros.

 

Conclusión

Permítame resumir estas cuatro características del cristianismo auténtico con cuatro breves declaraciones:

Esto es lo que Pablo le está comunicando a la iglesia de Creta y a nosotros el día de hoy:

Número 1: Ninguno de nosotros debería ocupar un papel con un sentido de permanencia.

Ninguno de nosotros.

Debemos vivir con una maleta mental preparada y lista, si Dios decide cambiar nuestro mundo y requiere un cambio.

Número 2: Ninguno de nosotros es tan capaz que no necesita ayuda.

Ninguno de nosotros

Incluso el apóstol Pablo necesitaba ayuda y compañía durante el largo invierno en Nicópolis. Si Pablo pidió ayuda, ¡ciertamente todos podemos pedirla también!

Número 3: Ninguno de nosotros debería evitar ser intencionalmente generoso.

Ninguno de nosotros.

La generosidad debe ser una característica sobresaliente en la vida del creyente. Ocuparse en buenas obras, y aprender a hacer más de ellas, es uno de los mandamientos de Cristo a través de Pablo a los creyentes en el siglo 1 y el siglo 21.

Número 4: Ninguno de nosotros puede lograrlo sin la bondad de la gracia de Dios.

Así es – dice Pablo – ninguno de nosotros.

Por eso Pablo termina con su típica bendición: la gracia sea con vosotros. ¿y notó que Pablo agregó la palabra todos?

Pablo comenzó esta carta diciéndole a Tito: La gracia de Dios sea contigo. Ahora, él termina esta carta diciendo: La gracia sea para toda la iglesia.

El texto dice: La Gracia sea con todos vosotros/ustedes.

Y qué cosa tan maravillosa – nadie se queda fuera – la gracia se extiende a todos.

¿Y por qué la gracia se extiende para todos?

  • Porque ninguno de nosotros logrará hacer lo que Dios nos dice en esta carta sin Su gracia
  • Nunca vamos serviremos a los demás sin Su gracia;
  • Nunca vamos a someteremos a la autoridad sin Su gracia;
  • Nunca creceremos en madurez y humildad sin Su gracia;
  • Nunca estableceremos hogares que honren a Cristo sin Su gracia;
  • Nunca resistiremos la presión y enfrentaremos las falsas enseñanzas sin Su gracia;
  • Nunca nos mantendremos enfocados en la verdad sin Su gracia;
  • Nunca viviremos con una anhelante anticipación de la venida de Cristo. . . sin Su gracia.

Es imposible vivir un cristianismo auténtico sin la obra de la gracia de Dios en nuestras vidas. ¡Sin la gracia de Dios, sería imposible aceptar y obedecer esta carta inspirada!

No es de extrañarnos que Pablo escriba, ¡La gracia esté con todos ustedes!

Y nosotros respondemos diciendo:  Gracias Pablo, gracias Espíritu de Dios a través de Pablo, gracias por describir esta vida cristiana bella y sobresaliente que, aunque es imposible en nuestras fuerzas, podemos vivirla cuando nos rindamos diariamente a la gracia de Dios.

Y para concluir nuestro estudio de esta maravillosa carta de Pablo a Tito, terminamos diciendo desde lo más profundo de nuestro corazón. . . Amén.

 

Este manuscrito pertenece a Stephen Davey

© Copyright 2012 Stephen Davey

Todos los derechos reservados

 

 

[i] Sam Gordon, The Genius of Grace: The Message of Ephesians (Ambassador, 2003), p. 377

[ii] D. Edmond Hiebert, Titus and Philemon (Moody Bible Institute, 1957), p. 77

[iii] Charles R. Swindoll, Insights on 1 & 2 Timothy, Titus (Zondervan, 2010), p. 317

[iv] E. M. Bounds, Power Through Prayer (Moody Press, 1979), p. 9

[v] John Phillips, Exploring the Pastoral Epistles (Kregel, 2004), p. 167

[vi] John MacArthur, Titus (Moody Press, 1996), p. 167

[vii] Tony Snow, “The Up Side” Guideposts (January 2008), p. 20

[viii] William Barclay, The Letters to Timothy, Titus and Philemon (Westminster Press, 1975), p. 266

[ix] John A. Kitchen, The Pastoral Epistles for Pastors (Kress Christian Publications, 2009), p. 568